MADRID, 16 Feb. (EUROPA PRESS) -
Decenas de personas se han manifestado este miércoles por la tarde en las ciudades francesas de Lille y Rouen, además de en la capital, París, en una nueva jornada de protestas contra la agresión sufrida por un joven de las afueras de la capital a manos de varios policías a principios de mes que ha cerrado con varios heridos y más de una veintena de detenidos.
En Rouen, ubicada en el norte de Francia, a unos 140 kilómetros de la capital, 21 personas han sido detenidas y dos heridas de levedad después de que estallaran enfrentamientos entre los manifestantes y la Policía, según 'Le Parisien'.
En Lille, cerca de la frontera con Bruselas, medio millar de personas se han concentrado para denunciar "las humillaciones" y los registros de carácter racista llevados a cabo por la Policía.
La protesta se ha desarrollado sin incidentes hasta que cerca de un centenar de personas ha continuado por una zona en la que la manifestación no estaba autorizada, lanzando botellas de cristal y tirando papeleras a su paso. En este contexto, la Policía ha detenido a una joven.
Por su parte, en la capital se han concentrado cerca de 400 personas de manera "espontánea" en las inmediaciones de la estación de Metro de Barbès-Rochechouart, cerca del barrio de Montmartre, en el norte de París.
La protesta se gestó en las redes sociales, por lo que no había sido anunciada a la Prefectura, y se centró en protestar "contra la violencia policial".
Pasadas las 19.00 horas, un grupo de manifestantes han lanzado varios proyectiles a las autoridades, a lo que respondieron lanzando gases lacrimógenos para dispersar a la gente.
Desde que se iniciaron las protestas, la semana pasada, se han detenido a cerca de 200 personas. Las manifestaciones responden a una agresión llevada a cabo por parte de cuatro policías en Aulnay-sous-Bois contra un joven que acusa a uno de ellos de violación.
AGRESIONES A THÉO Y MOHAMED K.
El pasado viernes, la Inspección General de la Policía Nacional (IGPN), el organismo responsable de supervisar a la Policía francesa, concluyó en su primer informe sobre el joven que "no hubo violación".
El joven, identificado como Théo, de 22 años, tuvo que ser ingresado en el hospital con importantes daños en el recto. El presidente de Francia, François Hollande, llegó a visitarlo en el centro hospitalario, donde le pidió que confiara "en la Justicia", que llevaría su caso "hasta el final".
Previamente denunció que mientras estaba siendo detenido, de espaldas, uno de los agentes le introdujo su porra en el ano.
"Me pidieron que pusiera las manos en la espalda y, esposado, me pidieron que me sentara. Me lanzaron gas lacrimógeno y me golpearon, y al sentarme sentí un terrible dolor en el trasero", ha explicado, según las declaraciones a las que ha tenido acceso la cadena de televisión BMFTV.
En su informe, la IGPN no niega que hubo penetración con una porra, ya que los médicos lo han confirmado, pero sostiene que "en todo caso" hubo una agresión involuntaria.
Este mismo martes, la Fiscalía de París abrió una nueva investigación preliminar después de que otro joven denunciara haber sido agredido por tres de los cuatro agentes acusados de agresiones recientemente.
Un joven identificado como Mohamed K., de 22 años, ha señalado en declaraciones al diario 'L'Obs' que el pasado 26 de enero tres policías le hicieron la zancadilla tratando de que cayera al suelo para después ser golpeado "en la cara, el vientre y en la espalda".
"Les dije que me quedaba sin aire, me llamaban 'sucio negro', 'zorra' y me escupieron", ha indicado, antes de agregar que uno de ellos trató de agredirle con su porra. "Uno de ellos empezó a golpearme con un 'táser', y me decía que no me resistiera o la utilizaría", ha denunciado.