Se declaran "libres de alianzas" tras el fin de la 'gran coalición' y condicionan apoyo a cinco prioridades
BRUSELAS, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
La delegación del PSOE en el Parlamento Europeo ha apostado este viernes por condicionar el apoyo de los socialistas europeos a nuevas reformas en la Unión Europea a que estos cambios atiendan a un "giro económico y social", a su juicio necesario para frenar las "tentaciones populistas" atraen el voto de los europeos descontentos.
Así se lo ha trasladado el PSOE al líder de los Socialistas y Demócratas (S&D) en la Eurocámara, el italiano Gianni Pittella, y al presidente del Partido Europeo Socialista (PES), el búlgaro Sergéi Stánishev, en una carta que detalla las claves de la que cree debe ser la 'hoja de ruta' para la próxima mitad de legislatura.
"Hay un peligroso sentimiento antieuropeo en la decepción que la política social y económico de la Unión Europea está generando en el electorado, hay incluso una tentación grave de recurrir a populismos y a la ultraderecha, como respuesta al descontento social", ha resumido en un encuentro con la prensa el jefe de la delegación del PSOE en la Eurocámara, Ramón Jáuregui.
El político vasco ha afirmado que la izquierda tiene la capacidad de recoger ese "descontento" y dirigirlo hacia propuestas "pragmáticas, posibles, pero de verdadera izquierda" que huyan del "proteccionismo" y austeridad que ha defendido la derecha en Europa.
El fin de la llamada 'gran coalición' entre el Partido Popular Europeo (PPE) y el S&D --por la negativa de los 'populares' a apoyar un candidato socialista para presidir la Eurocámara--, deja a la familia socialdemócrata "libre de alianzas", ha sostenido Jáuregui.
Ello debería traducirse en una posición de "colaboración" en la medida en que prosperen propuestas que atiendan las reivindicaciones socialistas y en una "oposición dura" si no es el caso.
Por ello, Jáuregui ha insistido en trasladar a la Comisión Europea y al Consejo la disposición de colaborar, pero también su determinación para bloquear iniciativas si no van en la dirección que proponen.
El eurodiputado español ha señalado que las posiciones dentro del grupo europeo están por definir, por lo que es prematuro apuntar reformas concretas que podrían utilizar como "palanca" de presión. Las negociaciones presupuestarias podrían ser una de las claves, ha dicho, pero no se plantean parar otras que puedan amenazar el proyecto europeo, como el proceso del 'Brexit'.
En su exposición de los cinco ejes prioritarios que apunta la delegación socialista española, Jáuregui ha querido dejar claro que no es el resultado del "monopolio" de líderes del PPE en las tres instituciones clave de la UE (Consejo europeo, Comisión Europea y Parlamento Europeo), pese al "disgusto" que ha supuesto este reparto.
Un cambio en alguna de las sillas --la del presidente del Consejo, Donald Tusk, debe confirmarse o renovarse antes de marzo-- "no limitaría ni suavizaría" el programa socialista, ha zanjado.
PRIORIDADES ECONÓMICAS Y SOCIALES
Las prioridades de los próximos dos años y medio deben pasar, según los socialistas españoles, por desarrollar el Pilar Social, incluido un marco europeo de salarios mínimos (de entorno al 60% del salario medio de cada país) y mayor protección para los desempleados y apoyo al empleo juvenil. También reclaman dar un impulso a nuevas reglas en materia de igualdad de género.
Además, piden que se materialice antes de que empiece 2018 el Impuesto de transacciones financieras (o 'tasa tobin') que han acordado diez de los 28 Estados miembros y que se avance en una política económica "expansiva" que anime la inversión y flexibilice el Pacto de Estabilidad.
La necesidad de luchar más y mejor contra el fraude, la evasión fiscal y los paraísos fiscales y también de contar con una política de gestión migratoria "efectiva y solidaria" cierran el marco de peticiones presentado por el PSOE a sus correligionarios en la Eurocámara.