MOSCÚ 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha asegurado que su aliado, el presidente sirio, Bashar al Assad, no tiene intención de abrir un nuevo frente en la guerra atacando a Israel en los Altos del Golán. Putin ha recibido este lunes en Moscú al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que ha explicado que su viaje busca coordinar las acciones militares de ambos países en Siria para que no haya incidentes.
"Sabemos y entendemos que el Ejército sirio y Siria en su conjunto está en una postura de defensa de su nación, no de apertura de un segundo frente", ha afirmado Putin, según recoge la agencia de noticias rusa Itar-Tass.
Putin ha reconocido que se han producido ataques con proyectiles contra territorio controlado por Israel lanzados desde Siria, los ha condenado y ha destacado que el armamento utilizado era de producción artesanal, no ruso. "En cuanto a los bombardeos, estamos al tanto, los condenamos. Hasta donde yo sé se han utilizado sistemas artesanales de misiles", ha señalado.
Sin embargo, Netanyahu ha expresado sus dudas. "Irán y Siria están intentando crear un segundo frente terrorista contra nosotros en los Altos del Golán", ha denunciado, al tiempo que ha insistido en que su principal objetivo es evitar que organizaciones como Hezbolá, aliado libanés de Al Assad, consiga armamento.
Netanyahu ha destacado que su visita a Moscú tiene como objetivo dejar clara la posición de Israel sobre Siria y "asegurarnos de que no hay ningún malentendido entre nuestras fuerzas". En los últimos días han proliferado las especulaciones sobre un incremento de la presencia militar rusa en Siria, mientras que Israel realiza incursiones aéreas puntuales para evitar que Hezbolá acceda a armamento avanzado.
Putin ha resaltado que las acciones de Rusia en Oriente Próximo "son muy responsables". "Muchas personas de la antigua Unión Soviética viven en el Estado de Israel, lo cual influye en las relaciones bilaterales", ha argumentado.