MOSCÚ 12 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha sostenido este miércoles que el ataque contra un convoy humanitario cerca de Alepo registrado el pasado 19 de septiembre fue obra de un "grupo terrorista", negando así que la aviación rusa esté detrás del mismo, como había apuntado Occidente.
Putin ha calificado de "acusaciones totalmente infundadas" el que se responsabilice a Rusia del ataque contra el convoy de la ONU y la Media Luna Roja Siria, en el que murieron una veintena de personas, y de "todos los crímenes". "Sabemos quién la atacó: fue una de las organizaciones terroristas", ha aseverado, según informa la agencia rusa Sputnik.
Según el presidente ruso, Rusia sabe que "los estadounidenses lo saben, pero prefieren adoptar otra postura y dedicarse a las acusaciones infundadas contra Rusia". "Esto no ayudará al caso", ha añadido el mandatario.
El Ministerio de Defensa ruso ya había apuntado a la posible autoría del Frente Fatá al Sham, el antiguo Frente al Nusra, que ese mismo día había lanzado una ofensiva en Alepo con fuego de artillería y tanques. Asimismo, Moscú ha sostenido que sus aviones no estaban en la zona cuando se produjo el bombardeo.
Por otra parte, Putin ha sostenido que es inaceptable que se chantajee a Rusia por su actuación en Siria, con la amenaza de nuevas sanciones. Según ha dicho, el chantaje y la presión "nunca han funcionado con Rusia ni van a funcionar".