MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
La filial de Al Qaeda en el Sahel, el Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes (JNIM), ha reclamado la autoría del atentado perpetrado la semana pasada contra un convoy en la localidad de Gaskindé, en el norte de Burkina Faso, uno de los catalizadores del golpe de Estado en el país africano.
El grupo ha señalado en un comunicado publicado a través de sus canales de propaganda que sus "muyahidín" dieron "un golpe económico y militar al criminal Ejército burkinés y sus ayudantes", antes de elevar a 65 el número de militares muertos en el ataque.
Asimismo, JNIM ha subrayado que "este golpe decisivo ha desatado un terremoto en las filas del Ejército burkinés que derivó en un golpe de Estado". "No hay otra forma de resolver los problemas que volver a Dios y seguir las enseñanzas de la religión islámica", ha zanjado.
Por su parte, el Ejército burkinés ha elevado este mismo miércoles a 37 el total de muertos en el ataque y ha señalado que se trata de 27 militares y diez civiles. Previamente, las autoridades burkinesas habían confirmado once fallecidos en el atentado.
Asimismo, ha resaltado que 29 personas --21 militares, siete civiles y un 'voluntario' reclutado para apoyar a las fuerzas de seguridad en materia antiterrorista-- resultaron heridas, mientras que tres personas siguen desaparecidas, tal y como ha recogido el portal de noticias Burkina 24.
El país se encuentra desde enero controlado por una junta militar tras el golpe dado por Paul-Henri Sandaogo Damiba contra el entonces presidente, Roch Marc Christian Kaboré, tras un amotinamiento de militares en protesta por la inseguridad y la falta de medios para hacer frente al yihadismo.
El propio Damiba fue expulsado del poder el 30 de septiembre tras un amotinamiento por el deterioro de la situación de seguridad, asonada encabezada por el capitán Ibrahim Traoré y considerada un 'golpe palaciego' por parte de un sector de la junta militar contra Damiba, quien ha huido a Togo.
Burkina Faso ha experimentado en términos generales un aumento significativo de la inseguridad desde el año 2015, con ataques obra tanto de la filial de Al Qaeda como la de Estado Islámico, lo que ha provocado una oleada de desplazados internos y refugiados hacia otros países de la región.