MADRID, 4 May. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de República Centroafricana (RCA) ha anunciado este martes que abrirá una investigación en torno a las denuncias de Naciones Unidas sobre presuntas violaciones de los Derechos Humanos por parte del Ejército centroafricano y sus aliados en su ofensiva contra los grupos de la Coalición Patriotas por el Cambio (CPC).
El primer ministro centroafricano, Firmin Ngrebada, ha indicado que se ha reunido durante la jornada con las representantes especiales adjuntas de la Secretaría General de la ONU en RCA, Lizbeth Cullity y Denise Brown, para abordar la situación.
Así, ha señalado a través de un mensaje publicado en su cuenta oficial en la red social Twitter que en la reunión se han tratado "las acusaciones de violaciones de los Derechos Humanos" por parte de las fuerzas gubernamentales y sus aliados, entre los que figuran mercenarios rusos y las fuerzas especiales de Ruanda. "Se abrirá una investigación judicial", ha manifestado.
El portavoz del Ejecutivo, Ange-Maxime Kazagui, afirmó que entre las acusaciones figuraban ejecuciones arbitrarias y extrajudiciales, torturas, abusos sexuales, arrestos arbitrarios, amenazas de muerte y otros tratamientos crueles, inhumanos y degradantes.
"El Gobierno está sorprendido por estas afirmaciones, que no se corresponden con los usos establecidos", dijo el portavoz del Gobierno, que recalcó que las autoridades "no fueron informados" de que había investigaciones en marcha por parte de la Misión Unidimensional Integrada de Naciones Unidas para la Estabilización en RCA (MINUSCA).
En este sentido, Kazagui manifestó que el Gobierno no fue notificado de las pesquisas e incidió en que "considera el documento como un compendio de denuncias", si bien hizo hincapié en que las autoridades "no permanecerán indiferentes" ante las mismas.
El país africano se ha visto sumido en una grave crisis a raíz de la eliminación de la candidatura a las presidenciales de diciembre del exmandatario Franois Bozizé, quien regresó al país a finales de 2019 para volver a ser candidato a la Presidencia, cargo que abandonó en 2014 ante el levantamiento de los rebeldes de Séléka, predominantemente musulmanes.
Tras ello, surgieron rumores sobre reuniones entre Bozizé y varios grupos firmantes del acuerdo de paz de 2019, seis de los cuales se coaligaron para formar la CPC y lanzar una ofensiva que llegó a amenazar la capital, Bangui. Si bien Bozizé negó en un primer momento lazos con los rebeldes, en la actualidad está al frente de la CPC.
Las elecciones, en las que el actual presidente, Faustin-Archange Touadéra, obtuvo un segundo mandato se celebraron a pesar de la ofensiva rebelde y de las reclamaciones de la oposición sobre un aplazamiento, rechazado por el Tribunal Constitucional. La oposición ha denunciado igualmente irregularidades en la segunda vuelta de las parlamentarias, celebrada en marzo.