KINSHASA, 14 Ago. (Reuters/EP) -
Un fiscal de República Democrática del Congo (RDC) ha acusado a 34 personas de genocidio y crímenes contra la Humanidad por la violencia interétnica desatada en el sur del país africano.
Los cargos contra los miembros luba, un grupo étnico bantú, y los twa, un pueblo pigmeo que habita en la zona de África Central, suponen la primera acusación civil por este tipo de crímenes en RDC.
"Éstos crímenes pueden tener penas muy duras, de hasta 30 años, por ejemplo", ha afirmado a Reuters el fiscal general de la provincia de Katanga, Caiphe Useni.
El proceso judicial comenzará el próximo jueves. Una ley promulgada en 2013 dio autorización a los tribunales civiles para juzgar casos de genocidio y crímenes contra la Humanidad, según ha explicado Useni.
Los luba y twa han estado en conflicto desde mayo de 2013 en el sureste de República Democrática del Congo, zona conocida por sus ricos depósitos de cobre, cobalto y otros metales.
Activistas locales han asegurado que la violencia desatada se debe a las injusticias sociales existentes entre los aldeanos baltú y los twa, cazadores y recolectores que desde antaño se han negado el acceso a la tierra y a los servicios básicos.
Human Rights Watch (HRW), por su parte, ha expresado que los combatientes luba mataron al menos a 30 personas en abril cuando atacaron un campamento de desplazados situado en el norte de Katanga, mientras que las milicias twa masacraron a ciudadanos luba en ataques de represalia.