LONDRES, 23 Mar. (Reuters/EP) -
Reino Unido introducirá nuevas medidas para detener el extremismo islámico, incluida una investigación sobre los tribunales de la sharía (la ley islámica) y aumento de sanciones contra los predicadores incendiarios, si el primer ministro David Cameron gana las elecciones de mayo, ha señalado la secretaria de Interior, Theresa May.
May ha dicho que Reino Unido no tolerará a aquellos que rechazan los valores democráticos del país, la libertad de expresión, la igualdad y el Estado de derecho, añadiendo que el extremismo islámico representa el mayor problema para ello.
"Para aquellos que eligen conscientemente rechazar nuestros valores y los principios básicos de nuestra sociedad, nuestro mensaje es claro: el juego ha terminado", ha dicho May en un discurso en Londres. "No toleraremos más este comportamiento", ha añadido.
Las medidas que ella propondrá bajo un Gobierno conservador incluyen prohibiciones de grupos que no cumplan las órdenes de proscripción de terrorismo actuales, así como órdenes para cerrar instalaciones de propiedad o utilizadas por los extremistas y nuevas medidas para orientar a quienes inciten al odio. También habrá una persona independiente para investigar el uso de la ley islámica por los tribunales de la 'sharia', usados para resolver disputas familiares por herencia por algunos musulames británicos.
Reino Unido ha hecho frente al problema sobre cómo lidiar con el extremismo y la radicalización entre sus 2,8 millones de musulmanes desde los ataques del 11 de septiembre en Estados Unidos.
El asunto pasó al primer plano después de las bombas suicidas en el metro de Londres en 2005 y el asesinato de un soldado británico en 2013 a mano de jóvenes islamistas británicos. En la actualidad, alrededor de 600 ciudadanos han viajado para luchar en Irak y Siria, entre los que se encuentra 'Jihadi John', sospechoso de ser uno de los miembro del grupo terrorista Estado Islámico más radicales.
May ha dicho que no todos los extremismos terminan en terrorismo, pero hay que parar a aquellos que difaman el odio y ha llamado a los musulmanes a unirse "en asociación" para combatir a los extremistas.
Los conservadores ya han prometido poner más ímpetu en las medidas de seguridad como parte de sus compromisos para las elecciones generales del 7 de mayo, que según las encuestas serán las más reñidas en décadas.
Además May ha sostenido que quiere hacer frente a todas las formas de extremismo, lo que también incluye a la extrema derecha. "El punto de partido de la nueva estrategia es el rechazo rotundo de que en una democracia liberal como la británica, 'todo vale'", ha sentenciado.