El desalojo de una fiesta callejera ilegal se salda con 22 policías heridos en Londres
MADRID, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Reino Unido ha informado este jueves de 1.118 positivos y 149 muertes adicionales por la pandemia de coronavirus, en un momento en el que los servicios médicos británicos están cada vez más centrados en rastrear los contactos de los nuevos casos para evitar grandes focos de contagio.
El Ministerio de Sanidad ha elevado a 307.980 y 42.230 las cifras de contagiados y fallecidos, respectivamente, por COVID-19. Reino Unido es el quinto país con más casos de todo el mundo --por detrás de Estados Unidos, Brasil, Rusia e India-- y el tercero con más víctimas mortales.
Las autoridades británicas han realizado hasta la fecha más de 8,7 millones de pruebas para detectar contagios y el servicio de salud pública (NHS) pretende ahora focalizar estos test en aquellas personas que pudieron estar en contacto con enfermos.
El programa de rastreo puesto en marcha hace tres semanas ha registrado casi 130.000 contactos vinculados a 20.000 enfermos solo en Inglaterra. De ellos, los servicios médicos lograron ponerse en contacto con más de 113.000, a los cuales se les instó a aislarse como medida de precaución, según datos oficiales recogidos por la BBC.
DESALOJO DE UNA FIESTA ILEGAL
El Ejecutivo de Boris Johnson ha comenzado a relajar las restricciones adoptadas en marzo para contener la pandemia y está previsto que el 4 de julio reabran los bares y restaurantes. Las grandes concentraciones, sin embargo, siguen estando prohibidas.
La Policía de Londres intervino este jueves de madrugada para disolver una fiesta ilegal en una calle del suroeste de la capital, en la zona de Brixton. A su llegada, los agentes exhortaron a los asistentes a disolverse, pero no solo no lo hicieron sino que "se volvieron hostiles", según un comunicado del cuerpo de seguridad.
Los choques se saldaron con 22 agentes heridos leves, dos de los cuales tuvieron que ser trasladados a un hospital, y destrozos en varios coches patrulla. Las fuerzas de seguridad detuvieron a cuatro personas por su presunta vinculación con los ataques.
La ministra del Interior, Priti Patel, ha condenado los hechos, "completamente inaceptables" en opinión del alcalde de Londres, Sadiq Khan. Un portavoz de Johnson ha advertido de que las autoridades actuarán con "toda la fuerza de la ley" ante cualquier agresión a personal de emergencia.