GINEBRA, 27 (Reuters/EP)
La relatora especial de Naciones Unidas en materia de Derechos Humanos que lidera la investigación sobre el asesinato del periodista saudí Yamal Jashogi ha declarado este sábado que ha solicitado de manera oficial tener acceso a la escena del crimen en el consulado saudí de Estambul, así como visitar Arabia Saudí.
Agnes Callamard, la enviada especial de Naciones Unidas que investiga el caso de Jashogi, que viajará este lunes a Turquía por invitación del Gobierno turco para investigar sobre las causas que rodearon la muerte del periodista, ha asegurado que todavía no ha recibido respuesta por parte de las autoridades saudíes.
Este jueves, declaró que el panel de tres miembros --que cuenta con un experto forense y otro legal-- intentará establecer qué individuos y estados son responsables de lo sucedido.
Jashogi, un columnista del diario norteamericano 'The Washington Post' que vivía desde hace años en Estados Unidos, fue asesinado en el consulado de Arabia Saudí en Estambul el pasado dos de octubre, después de acudir a recoger unos documentos que necesitaba para poder casarse con su prometida.
Los servicios de Inteligencia de Estados Unidos creen que el príncipe heredero saudí, Mohammed bin Salman, fue el que ordenó la operación para matar al periodista, una figura muy crítica con el régimen saudí. Se cree que su cuerpo fue descuartizado y trasladado a un lugar cuya ubicación todavía se desconoce. Riad, por su parte, ha rechazado cualquier tipo de implicación de Bin Salman.
"He solicitado acceso al consulado saudí en Estambul y una reunión con su embajador en Turquía", ha explicado Callamard en un email al que ha tenido acceso la agencia de noticias Reuters. "También he solicitado permiso para llevar a cabo una visita para investigar a Arabia Saudí", ha añadido.
De acuerdo con las autoridades saudíes, al menos 21 personas han sido arrestadas por su implicación en el caso, de las cuales 11 han sido imputadas y están a la espera de juicio. Según la Fiscalía de Arabia Saudí, intentarán que sean condenados a pena de muerte.
"Considero que esta investigación es un paso necesario, dentro de muchos otros, para averiguar la verdad crucial y poder exigir responsabilidades de manera formal sobre el terrible asesinato del señor Jashogi", ha apuntado Callamard.