MADRID, 17 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno checo ha señalado a los servicios secretos rusos por la explosión ocurrida en 2014 en un arsenal del Ejército en Vrbetice y ha anunciado la expulsión de 18 trabajadores acreditados de la Embajada rusa en Praga.
Los 18 ciudadanos rusos, considerados miembros de los servicios secretos rusos, deberán abandonar el país en un plazo de 48 horas, según ha anunciado el vice primer ministro y ministro de Asuntos Exteriores checo, Jan Hamaceck, y recoge la prensa checa.
El primer ministro checo, Andrej Babis, ha explicado que ya se ha trasladado de esta información al presidente checo, Milos Zeman, quien estaría totalmente de acuerdo con la decisión adoptada.
"Basándonos en pruebas claras obtenidas a través de una investigación de nuestras fuerzas de seguridad, debo decir que hay una sospecha razonable de la implicación de agentes de la unidad 29155 del servicio secreto militar ruso (GRU) en la explosión de los almaenes de munición de Vrbetice en 2014", ha declarado Babis, según recoge el canal de noticias público CT24.
El almacén número 16 de la base de Vrbetice explosionó el 16 de octubre de 2014 y un segundo almacén, el número 12, sufrió el mismo destino el 3 de diciembre de ese mismo año. Dos personas murieron en la primera deflagración, que causó importantes daños y obligó a evacuar las poblaciones cercanas.
El propio Babis ha recordado las dos muertes provocadas por la primera explosión en su comparecencia de este sábado y ha destacado la labor de la Policía, en particular la del Centro Nacional para Combatir el Crimen Organizado. "República Checa es un Estado soberano y debe responder en consecuencia a estos hechos sin precedentes", ha indicado Babis.
EXPULSIÓN DE 18 RUSOS
Así, Hamacek ha informado de la expulsión de los 18 ciudadanos rusos con credenciales diplomáticas, "identificados claramente como agentes de los servicios secretos rusos GRU y SVR" o Servicio de Inteligencia Exterior.
"18 trabajadores de la Ebajada rusa deberán abandonar República Checa en un plazo de 48 horas", ha explicado Hamacek, que ya ha trasladado la decisión al embajador ruso, Alexander Zmeevski. "Estamos en una situación similar a la de, por ejemplo, Reino Unido en 2018 en el cadso del intento de envenenamiento de Salisbury", ha indicado en referencia al incidente protagonizado por el antiguo espía ruso Sergei Skripal y su hija Yulia.
Hamacek ha subrayado que las relaciones con Rusia se verán afectadas y ha indicado que informarán de lo ocurrido a sus aliados de la UE y la OTAN y les pedirán apoyo, si fuera necesario.
Tras conocerse la expulsión, fuentes diplomáticas rusas han argumentado que "probablemente Praga había decidido cerrar su Embajada en Moscú", mientras que el vicepresidente de la Comisión de Asuntos Exteriores del Consejo de la Federación (Cámara Alta del Parlamento), Vladimir Jabarov, ha calificado de "absurda" la acusación sobre las explosiones de 2014. "Rusia no tiene nada mejor que hacer que hacer explosionar almacenes. Jamás hemos creído que Chequia fuera nuestro oponente", ha argumentado.