Footgrafías de ciudadanos asesinados durante el genocidio en Ruanda 1994
NOOR KHAMIS / REUTERS
Actualizado: jueves, 3 marzo 2016 17:33

KINSHASA 3 Mar. (Reuters/EP) -

El Gobierno de República Democrática del Congo (RDC) extraditará a Ruanda a Ladislas Ntaganzwa, supuestamente implicado en el genocidio que acabó con la vida de más de 800.000 tutsis en 1994, según ha anunciado este jueves el ministro de Justicia congoleño, Alexis Thambwe.

Con este anuncio, el ministro ha cambiado de postura, tras haber supeditado en un primer momento la extradición a la entrega de sospechosos reclamados por su Ejecutivo a Ruanda.

Ladislas Ntaganzwa, un antiguo alcalde imputado por su participación en la matanza de cerca de 800.000 tutsis y hutus moderados a manos de milicias hutus, fue arrestado en diciembre de 2015 en el este de República Democrática del Congo. Ntaganzwa es uno de los nueve fugitivos más buscados en relación con el genocidio.

Ruanda ha acusado al sospechoso de exterminio, asesinato, abusos sexuales, genocidio e incitación pública al mismo. Thambwe ha explicado que, a mediados de febrero, prometió a una delegación del Mecanismo para los Tribunales Penales Internacionales, un órgano de Naciones Unidas encargado de supervisar las acusaciones relacionadas con el genocidio, que extraditaría a Ntawanzwa en un mes.

"Les confirmé en dicha ocasión que acordamos extraditar a Ladislas", ha dicho el ministro. "Por el momento, solo nos quedan unas pocas formalidades de las que ocuparnos. El traslado podría producirse en cualquier momento", ha añadido.

Poco después del arresto, las autoridades congoleñas instaron a Kigali a extraditar a algunos individuos solicitados por Kinshasa antes de producirse el traslado de Ntawanzwa. Entre ellos, se encuentra Laurent Nkunda, un antiguo líder de la insurrección respaldada por Ruanda en el este de RDC entre 2006 y 2009 y que en la actualidad se encuentra bajo arresto domiciliario en Kigali, según ha señalado la ONU.

Sin embargo, Thambwe ha explicado este jueves que la reciprocidad no puede aplicarse en el caso de Ntaganzwa, dado que el sospecho es objeto de una orden de arresto internacional respaldada por la ONU.

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