MADRID, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -
El embajador de Estados Unidos en España, Alan D. Solomont, ha afirmado este miércoles que el hecho de que en las elecciones legislativas de este martes el Partido Republicano haya arrebatado al Demócrata el control de la Cámara de Representantes y recortado significativamente la ventaja demócrata en el Senado no va a provocar un cambio en la política del presidente Barack Obama.
En un encuentro con periodistas en la Embajada, recordó que Obama llegó a la Casa Blanca con dos grandes propósitos: "atajar los problemas de la clase media", que en la última década ha visto cómo "se le escapaba cada vez más el sueño americano", y "cambiar la forma de actuar de Estados Unidos en el mundo". En estos aspectos "la agenda del presidente Obama no va a cambiar", aseguró.
Solomont reconoció que el electorado estadounidense estaba "frustrado y preocupado" por la recesión económica, "la más grave desde los años 30", y eso se ha traducido en que los "triunfos" de los demócratas en los comicios de 2006 y 2008 han experimentado una "marcha atrás" por los avances que han hecho ahora los republicanos en las dos cámaras del Congreso.
Pese a ese descontento de los estadounidenses, el embajador defendió las medidas que ha tomado el presidente para hacer frente a los problemas económicos porque "han ido en la buena dirección en una situación muy difícil" y pronosticó que harán posible la "recuperación" pero "no a corto plazo".
Por otro lado, explicó que en Estados Unidos es "típico" que en las llamadas "elecciones de mitad del mandato" el partido del presidente pierda escaños, como ha ocurrido ahora, "y más con una crisis económica como la actual". En este contexto, indicó que esto fue lo que le ocurrió a Bill Clinton en 1994 y aun así fue reelegido en 1996.
Aunque admitió que el número de escaños que han perdido los demócratas este vez es "inusualmente alto", añadió que no lo es tanto si se compara con los resultados de elecciones anteriores.
POLÍTICA EXTERIOR SIN CAMBIOS
Respecto a la política exterior del Gobierno estadounidense, Solomont dijo que Obama ha realizado grandes cambios durante estos dos años, como su acercamiento al mundo árabe, su apuesta por la paz en Oriente Próximo y su aspiración de acabar con las armas nucleares, y aseguró que estos "principios" que han guiado su política seguirán haciéndolo.
Además, consideró los resultados electorales "no tendrán ningún impacto en el liderazgo de Estados Unidos en el mundo" y que "Obama seguirá siendo muy popular en Europa y en España". Igualmente, afirmó que la relación entre España y Estados Unidos "nunca ha sido tan buena como ahora" y que "seguiremos reforzando nuestra asociación" sobre la base "del respeto mutuo y los intereses comunes".
El diplomático señaló que su país "no puede resolver solo" problemas que se presentan en este mundo "globalizado" como el terrorismo, la proliferación de armas nucleares o el calentamiento del planeta, pero estos problemas "tampoco se pueden solucionar sin Estados Unidos".
Solomont declaró que dado que "lo que ocurre en unos lugares del mundo afecta a otros", Washington apuesta por la "cooperación internacional" para hacer frente a las dificultades. Por eso, dijo, el presidente estadounidense va a seguir participando en encuentros internacionales como el que celebra el G-20 este mes de noviembre en Seúl, porque "la prosperidad no puede regresar sin la cooperación económica mundial".
En cuanto a las políticas del Gobierno dentro de Estados Unidos, el embajador destacó que desde que llegó a la Casa Blanca, el presidente "ha tenido un gran éxito en la implementación de su agenda" al haber conseguido aprobar la reforma del sistema sanitario, modificar la regulación financiera o introducir cambios en el sistema educativo.
Ahora, pese al triunfo de los republicanos en las urnas, el embajador indicó que no cree que "vaya a cambiar la agenda", ni siquiera en lo que se refiere a la reforma sanitaria, a la que el Partido Republicano se ha opuesto con firmeza y que también se enfrenta al rechazo del movimiento conservador Tea Party.
TEA PARTY
Cuando le preguntaron por el apoyo cada vez mayor que tiene el Tea Party entre los estadounidenses, Solomont dijo que pese al éxito de este grupo, que "representa una amenaza en la política americana" y un "conservadurismo económico", la política estadounidense "siempre tiende a ir al centro", alejándose de los extremos.
El diplomático señaló que aunque el Tea Party, que "representa la frustración y el enfado con Washington", tiene el respaldo del 18 o el 19 por ciento del electorado, muchos de esos simpatizantes "no van a los mítines ni hacen contribuciones". Asimismo, aseguró que la baja participación en las elecciones de este martes ha hecho que "la voz del Tea Party haya tenido más fuerza".
Lo que quiere el 75 por ciento de los estadounidenses, agregó Solomont, es "que los partidos alcancen un mayor compromiso entre sí" para "centrarse en sus problemas del día a día" y "que la política esté guiada por el interés público". En este contexto, resaltó que Obama pretende "tender la mano" a los republicanos que ahora dominan Cámara de Representantes y mantiene "su deseo de lograr un compromiso" entre los dos grandes partidos.
Por último, el embajador manifestó que los resultados que obtengan los demócratas en los comicios presidenciales de 2012 dependerán de hasta qué punto consigan "movilizar a los jóvenes" que les han dado su voto en ocasiones anteriores.