KYAR GAUNG TAUNG (BIRMANIA), 16 (Reuters/EP)
Las mujeres musulmanas rohingyas se han reunido este sábado para informar a los periodistas sobre sus familiares desaparecidos después de que los medios internacionales fueran escoltados por primera vez a una aldea en el estado de Rajine, afectado por la violencia desde octubre.
"Mi hijo no es un terrorista. Fue detenido mientras trabajaba en la granja", ha asegurado Sarbeda, una de las mujeres que se ha reunido con los periodistas.
Rajine, en el oeste de Birmania, ha sufrido una creciente violencia religiosa en un país de mayoría budista. Desde 2012, ha habido cientos de musulmanes rohingyas asesinados y más de 140.000 desplazados.
Las tensiones han aumentado en los últimos meses, con un ataque atribuido a los rohingya contra puestos de guardia cerca de la frontera con Bangladesh, que fue respondido con fuerte represión militar. Según Naciones Unidas, cientos de personas han muerto y 75.000 tuvieron que huir a Bangladesh.
Los investigadores de la ONU que han entrevistado a refugiados rohingya aseguran que las fuerzas de seguridad llevan a cabo crímenes contra la humanidad mediante la tortura, incendios provocados, violaciones en grupo y asesinatos.
El Gobierno, liderado por la Premio Nobel Aung San Suu Kyi, ha negado estas acusaciones y está bloqueando la entrada a una misión de la ONU encargada de investigar las alegaciones.
Además, el Gobierno ha mantenido a los periodistas independientes y a los observadores de Derechos Humanos fuera de la zona en los últimos nueve meses.
Sin embargo, el Ministerio de Información ha escoltado esta semana a más de una docena de periodistas extranjeros y locales que representaban a los medios de comunicación internacionales a la zona.
El comandante de la Policía de la Guardia de Fronteras birmana, el general Thura San Lwin, aseguró que algunos aldeanos habían contado afirmaciones erróneas y que luego fueron acusados y encarcelados por mentir a las autoridades.
"Los medios de comunicación han dicho que incendiamos viviendas y que existían casos de violación. Dan información equivocada", señaló San Lwin a los periodistas, refiriéndose a los aldeanos.