DUBAI/BEIRUT 3 Ago. (Reuters/EP) -
El presidente de Irán, Hassan Rouhani, ha ratificado este domingo su confianza en el acuerdo nuclear alcanzado entre su país y seis potencias mundiales, haciendo frente así a las críticas de dirigentes más conservadores y subrayando los logros obtenidos en sus dos años de mandato.
Con la mirada puesta en una posible campaña para la reelección en el 2017, Rouhani ha aprovechado una entrevista en directo en la televisión estatal para referirse al acuerdo como una nueva "tercera vía" para la política exterior iraní y ha rechazado las críticas del ala dura de la dirigencia local, que le acusan de rendirse ante Occidente.
"Esta idea de que tenemos dos opciones ante el mundo, ya sea someterse o derrotarlo, es ilógica: siempre hay una tercera vía de cooperación constructiva con el mundo en un marco de intereses nacionales", ha señalado.
"Trabajamos con Naciones Unidas sin una guerra, súplicas o rendición, sino con lógica, negociación y diplomacia en una vía legal", ha agregado, evitando cualquier mención directa a Estados Unidos u otras potencias de Occidente.
También se ha referido a los logros económicos del Gobierno, que ha reducido la inflación desde máximos por encima del 40 por ciento y restableció el crecimiento económico, tendencias que deberían mantenerse con el prometido alivio a las sanciones contra la república islámica.
Rouhani también ha restado importancia al riesgo de que las inspecciones nucleares puedan poner en peligro secretos de estado y la capacidad de defensa de Irán, una línea clave de las críticas del ala dura del aparato de seguridad iraní, que teme un ataque militar de las potencias occidentales.
El líder supremo iraní, el ayatolá Ali Khamenei, prohibió el acceso de inspectores de Naciones Unidas a las instalaciones militares y fue sólo con delicados términos que este punto de fricción se resolvió en el acuerdo.
"No revelaremos ni siquiera el secreto nacional mas pequeño, sea militar, científico, comercial, o social (...) nuestra capacidad de defensa no será menoscabada para nada", ha agregado Rouhani.
El mandatario ha convocado al apoyo popular para la apertura diplomática, considerando su victoria en las elecciones hace dos años como un "referendo" sobre cómo Irán debería conducirse a si mismo en la escena mundial.
"Desde su perspectiva, ayer éramos un país amenazador y ahora somos un país con el que se necesita alcanzar un acuerdo", ha sentenciado.