BRASILIA, 26 Jul. (Reuters/EP) -
La presidenta suspendida de Brasil, Dilma Rousseff, no asistirá a la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos que se celebrarán entre el 5 y el 21 de agosto en Río de Janeiro, según ha anunciado este martes un asesor suyo.
"No va a ir", ha dicho la fuente presidencial en declaraciones a la agencia de noticias Reuters bajo condición de anonimato, despejando así una incógnita que ha generado una enorme tensión política en el gigante suramericano.
Rousseff fue suspendida el pasado 12 de mayo a la espera de que el Senado celebre un juicio político en su contra para determinar si incurrió en un "crimen de responsabilidad" al aumentar el gasto público en plena campaña para la reelección sin autorización del Congreso.
Michel Temer, hasta entonces su vicepresidente, asumió el Gobierno de forma interina y será quien presida la ceremonia inaugural desde el balcón de autoridades del Estadio de Maracaná, aunque ha invitado a Rousseff a seguirlo desde las gradas.
La líder izquierdista ya dijo el lunes, en una entrevista concedida a RFI, que no iría para estar "en segundo plano". El ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, padrino político de Rousseff, ha anunciado que tampoco irá.
Fuentes diplomáticas consultadas por Reuters han explicado que la presencia de Rousseff y Temer en la ceremonia inaugural supondría un conflicto para los líderes internacionales, añadiendo aún más problemas a unos Juegos Olímpicos marcados por la polémica.