RÍO DE JANEIRO, 21 Ago. (EUROPA PRESS) -
La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, ha invitado a la canciller alemana, Angela Merkel, a que su país invierta en el Programa de Inversiones en Logística del Gobierno brasileño, que en los próximos años pretende construir todo tipo de infraestructuras, como puertos, aeropuertos y centenares de kilómetros de carreteras.
Durante la visita que Merkel ha cerrado este jueves en Brasilia, Rousseff ha remarcado la madurez de las relaciones con Alemania, que es el primer socio comercial de Brasil dentro de la Unión Europea (UE) y que tiene 1.600 empresas instaladas en el gigante sudamericano.
Además de las oportunidades de nuevas inversiones las dos mandatarias han hablado de las negociaciones para llegar a un acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la UE. Aunque el diálogo está encallado, las dos se han comprometido a que las dos partes presenten una oferta definitiva este mismo año.
La canciller alemana ha aludido sutilmente al papel de bloqueo de Argentina al decir que el Mercosur es un grupo "bastante heterogéneo", pero se ha mostrado optimista porque en su opinión, "Brasil ha asumido un papel de liderazgo", ha apostillado.
CAMBIO CLIMÁTICO
Igual que en los últimos encuentros internacionales, como en su la vista que hizo al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en la Casa Blanca, el cambio climático también ha tenido un papel central en la agenda, sobre todo debido a la cumbre sobre el clima que la ONU realizará en París el próximo mes de diciembre.
Si en el encuentro con Obama Rousseff se comprometió a llegar a una tasa de deforestación cero de la Amazonía en 2030 y a replantar 12 millones de hectáreas de bosque tropical, en esta ocasión ha anunciado que Brasil conseguirá "descarbonizar" su economía en lo que queda de siglo, para que en 2100 dependa únicamente de energía limpia.
"Brasil ha dado un enorme paso con el objetivo de descarbonizar la economía. Los compromisos de Brasil deben servir para animar a otros países a ser más audaces", ha dicho Merkel, recordando que Alemania colabora en estos objetivos con acuerdos que contemplan reforestación o la construcción de una gran torre que vigilará la tala de árboles en el corazón de la Amazonía.
Merkel y Rousseff también han mostrado sintonía a la hora de reclamar la reforma del Consejo de Seguridad de la ONU, algo que según la presidenta brasileña ayudaría a que hubiera una gobernanza "más representativa de la actual situación de correlación de fuerzas entre todas las economías del mundo".
ACUERDOS BILATERALES
Merkel apenas ha estado un día y medio en Brasil, pero llegó acompañada por varios ministros, que han cerrado varios acuerdos bilaterales: los dos países compartirán el registro mutuo y la certificación de medicamentos, colaborarán en la explotación de tierras raras y las empresas de investigación industrial brasileñas podrán aprender de las alemanas.
La canciller alemana ha llegado a Brasilia en un momento de gran fragilidad política para Rousseff, con las recientes manifestaciones pidiendo su 'impeachment' en la calle, la economía en horas bajas y el Congreso prácticamente ingobernable.
Merkel tampoco está en su mejor momento, pues cada vez se enfrenta a más dificultades dentro de su propio partido, la Unión Demócrata Cristiana (UCD), dividido por el tercer paquete de ayudas a Grecia.