Archivo - El viceministro de Exteriores de Rusia, Sergei Riabkov (archivo) - BAI XUEQI / ZUMA PRESS / CONTACTOPHOTO - Archivo
Moscú afirma que la decisión de Washington y Berlín "es parte de la escalada en curso" y "un elemento de intimidación"
MADRID, 11 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de Rusia ha advertido este jueves con una "respuesta militar" en caso de que Estados Unidos dé el paso de desplegar en Alemania en 2026 armamento de largo alcance, tal y como anunciaron ambos países en un comunicado conjunto publicado en el marco de la cumbre que está celebrando la OTAN en Washington.
El viceministro de Exteriores ruso, Sergei Riabkov, ha afirmado que la decisión, que implicaría el primer despliegue estadounidense de este armamento en Alemania desde el fin de la Guerra Fría, "es parte de la escalada en curso" y "uno de los elementos de intimidación, que a día de hoy es el principal componente de la postura de la OTAN y Estados Unidos respecto a Ucrania".
"La naturaleza de nuestra reacción será decidida con calma y de forma profesional. El Ejército, sin duda, ya tiene este mensaje en cuenta", ha manifestado, al tiempo que ha señalado que Moscú "desarrollará ante todo una respuesta militar a este nuevo juego, sin nervios y sin emociones", según ha recogido la agencia rusa de noticias Interfax.
Riabkov ha apuntado además que el comunicado de Washington y Berlín contempla que entre las armas desplegadas figuren misiles de crucero tipo Tomahawk y misiles SM-6. "Lo menciono sólo para recalcar que, una vez más, estábamos en lo cierto cuando dijimos hace años que Estados Unidos se estaba preparando para adaptar estos sistemas para su despliegue en tierra", ha zanjado.
Asimismo, el expresidente ruso y actual vicepresidente del Consejo de Seguridad del país, Dimitri Medvedev, ha criticado duramente el apoyo de la OTAN a la futura integración de Ucrania en la Alianza y ha sostenido que la conclusión que Moscú debe sacar de esta situación "es obvia".
"Debemos hacer todo lo posible para garantizar que 'el camino irreversible de Ucrania' hacia la OTAN termina con la desaparición de Ucrania o con la desaparición de la OTAN. O mejor, aún, de ambas", ha afirmado Medvedev a través de un breve comunicado publicado en su cuenta en Telegram.
Por su parte, el ministro de Defensa de Alemania, Boris Pistorius, ha sostenido este mismo jueves que el plan estadounidense es también un mandato para que Alemania y los demás Estados europeos inviertan ellos mismos en el desarrollo y la adquisición de tales armas. Así, ha argüido que el despliegue temporal de estas armas estadounidenses "dará exactamente el tiempo que se necesita para ello".
Pistorius ha manifestado además que espera que Estados Unidos mantenga este despliegue de misiles de crucero y otras armas de largo alcance en Alemania, incluso si el republicano Donald Trump llega a la Presidencia estadounidense tras las elecciones que se celebrarán en noviembre, en las que el mandatario, Joe Biden, se presenta a la reelección.
"Estamos hablando de un grave déficit de capacidades en Europa", ha afirmado, en declaraciones concedidas a la emisora alemana Deutschlandfunk, donde ha explicado que la situación deriva también de los planes de la OTAN. "Por eso no me imagino a ningún otro presidente (que no sea Joe Biden) alejándose de esto", ha apostillado, tal y como ha recogido la agencia alemana de noticias DPA.
El anuncio de Estados Unidos y Alemania destaca que este despliegue tiene como objetivo de demostrar el "compromiso" de Washington con la OTAN y sus contribuciones a la "disuasión integrada europea" y especifica que "estas unidades convencionales de largo alcance incluirán (misiles) SM-6, Tomahawk y armas hipersónicas desarrolladas, que tienen un alcance significativamente mayor que los materiales terrestres actuales en Europa".
Por otra parte, Estados Unidos y cuatro países europeos --Países Bajos, Alemania, Italia y Rumanía-- anunciaron el miércoles que enviarán sistemas de defensa antiaérea Patriot a Ucrania tras la última oleada de ataques rusos que durante la jornada del lunes dejaron cerca de 40 muertos y 170 heridos, en el marco de la invasión desatada en febrero de 2022 por orden del presidente ruso, Vladimir Putin.