Archivo - El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov. - Alexey Danichev/Kremlin/Dpa - Archivo
MADRID 18 Dic. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades rusas han afirmado este miércoles que el asesinato del jefe de las Tropas de Defensa Radiológica, Química y Biológica de las Fuerzas Armadas de Rusia, Igor Kirillov, en un atentado con bomba pone de manifiesto la necesidad de haber iniciado hace casi tres años la invasión de Ucrania.
El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha indicado durante una rueda de prensa que este tipo de acciones son las que justifican la "operación militar especial" del Ejército de Rusia en territorio ucraniano y ha manifestado que "deja claro quién es el verdadero enemigo" de Moscú.
"Esto constata de qué son capaces y supone una prueba más de la necesidad de llevar a cabo nuestras acciones en el marco de la operación militar", ha aseverado en declaraciones recogidas por la agencia rusa de noticias TASS.
En este sentido, ha recordado que Kiev es el "cliente" que ha contratado los servicios del autor del atentado y ha recordado que este tipo de "métodos de trabajo" no son "ajenos a las autoridades ucranianas". Así, ha explicado que la Inteligencia rusa y las fuerzas de seguridad están trabajando para investigar el caso.
"Nuestros servicios especiales y agencias del Gobierno están trabajando de forma efectiva y rápida, pero es obvio quién ha contratado estos servicios y quién ha organizado el atentado. Se confirma la implicación de Kiev", ha afirmado.
Horas antes, las autoridades de Rusia han anunciado la detención de un ciudadano de Uzbekistán por su presunta responsabilidad en el atentado en el que murieron Kirillov y uno de sus asistentes. Según han explicado las fuerzas de seguridad, el presunto autor fue "reclutado por los servicios especiales ucranianos y, siguiendo sus instrucciones, llegó a Moscú, donde recibió un explosivo de fabricación artesanal de alta potencia y lo colocó en un patinete eléctrico que aparcó cerca de la entrada de la casa de Kirillov".
La autoría del atentado ya ha sido reclamada por los servicios especiales de Ucrania, según fuentes del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) citadas por las agencias ucranianas de noticias Ukrinform y UNIAN, que han afirmado que Kirillov "era un criminal de guerra y un objetivo totalmente legítimo".
El ataque, que Moscú investiga como un caso de terrorismo, ha sido ejecutado un día después de que el SBU imputara a Kirillov por su supuesta responsabilidad en el uso de armamento químico en el país en el marco de la invasión, desatada en febrero de 2022 por orden del presidente ruso, Vladimir Putin.