Actualizado: lunes, 7 septiembre 2015 18:02


BRUSELAS, 7 Sep. (Reuters/EP) -

El Gobierno ruso ha advertido este lunes de que es poco probable que se eche atrás en llevar a cabo un embargo comercial contra Ucrania cuando el tratado de libre comercio (TLC) con la Unión Europea entre en vigor en enero, ya que las conversaciones en Bruselas para evitarlo no han resultado demasiado fructíferas al respecto.

"Tenemos esperanza, aunque el trabajo está progresando con dificultad", ha afirmado el ministro ruso de Economía, Alexei Uliukayev, en referencia a si se podría llegar a un acuerdo para satisfacer las objeciones de Moscú antes de que Rusia imponga un embargo. "Pero creemos que nuestros esfuerzos conjuntos pueden lograr el resultado que queremos. Hay una oportunidad, aunque yo no diría que es muy grande", ha añadido.

Sin embargo, Uliukayev ha asegurado que la reunión de Bruselas se ha llevado a cabo en una atmósfera "positiva". Las autoridades trabajarán ahora durante aproximadamente un mes para acortar las distancias antes de que los expertos técnicos se reúnan de cara a un nuevo encuentro ministerial a principios de noviembre.

El ministro ha comentado que el Kremlin está considerando "en principio, las mismas" sanciones a Ucrania que las que ha aplicado contra la UE. Moscú ha prohibido la importación de alimentos de la Unión Europea en respuesta a las sanciones impuestas por los países comunitarios por anexionarse Crimea.

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