MADRID 12 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de Rusia han descartado este viernes que el despliegue de misiles estadounidenses en Alemania vaya a suponer una "amenaza grave" a su seguridad, un día después de que el canciller alemán, Olaf Scholz, remarcara la necesidad de contar con este armamento ante los riesgos que surgían desde Moscú.
"La ciencia militar, la tecnología militar, nuestras capacidades en este área han avanzado tanto que no sentimos una amenaza grave para nuestra seguridad", ha asegurado el viceministro de Asuntos Exteriores, Sergei Riabkov, en Canal 1.
Riabkov ha subrayado que Rusia cuenta con todas las capacidades necesarias para contrarrestar de manera rápida, ha dicho, cualquier "intento" por parte de Occidente, y más concretamente Estados Unidos, de generar unas "amenazas inaceptables", que a día de hoy son parte "fundamental" de la política de la OTAN con respecto a Rusia.
En contraste con algunas de las primeras reacciones desde Rusia sobre este asunto, como la de la presidenta del Senado, Valentina Matvienko, que advertía de que la respuesta seria "dura", Riabkov ha rebajado el tono y ha asegurado que la parte rusa actuará en consonancia de forma "tranquila" y "profesional".
A su paso por la cumbre de la OTAN que se celebró estos días atrás en Washington, Scholz ha confirmado que a partir de 2026, Estados Unidos desplegará en territorio alemán misiles de largo alcance modelo SM-6, Tomahawk y otro tipo de armas cuyo alcance es mayor del que está desplegado actualmente en Europa.
Scholz argumentó que era necesario contar con este tipo de arsenal en suelo alemán debido a que existe "una increíble acumulación de armas en Rusia que amenazan el territorio europeo".