El Kremlin subraya que Berlín descarta que pueda hablarse de una "intervención rusa"
MADRID, 7 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Presidencia de Rusia ha afirmado este miércoles que la detención de más de 20 ultraderechistas en Alemania por supuestamente planear un golpe de Estado "es un problema interno" del país europeo y ha recalcado que Moscú no tiene relación alguna con lo sucedido.
"Es un problema interno de Alemania. Ellos mismos han dicho que no puede hablarse de intervención rusa. Nos hemos enterado por los medios y no tenemos nada que decir al respecto", ha dicho el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, según ha informado la agencia rusa de noticias Interfax.
La Fiscalía de Alemania ha confirmado a primera hora del día el arresto de 25 miembros de un grupo ultraderechista sospechosos de planificar un golpe de Estado, al tiempo que han resaltado que los detenidos pretendían "usar medios militares" contra representantes estatales y formar posteriormente su propio gobierno.
Así, ha detallado que los detenidos son "presuntos miembros y seguidores de una organización terrorista" y ha confirmado que hay operaciones en marcha para arrestar a un total de 52 personas. Así, ha manifestado que 22 de los detenidos son miembros del grupo y son todos de nacionalidad alemana, mientras que entre los tres "seguidores" detenidos hay dos alemanes y un ruso.
El grupúsculo buscaba formar un "gobierno militar de transición" que "negocie el nuevo orden en Alemania con las potencias aliadas victoriosas en la Segunda Guerra Mundial, en línea con la clásica narrativa del Reich". "Desde el punto de vista de la asociación, el principal contacto para estas negociaciones es Rusia", ha dicho la Fiscalía, que ha añadido que el cabecilla, identificado como 'Príncipe Henrich XIII' "había contactado con representantes de Rusia, si bien, según las investigaciones, no hay indicaciones de que las personas contactadas hayan respondido positivamente a sus peticiones".
Según las informaciones recogidas por el diario alemán 'Die Welt', entre las viviendas que están siendo objetivo de redadas y registros figura la casa de Birgit Malsack-Winkemann, una antigua parlamentaria del ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD). Así, el medio ha indicado que las fuerzas especiales han llegado a su vivienda en Berlín en torno a las 6.00 horas en el marco de las operaciones, en las que también han sido detenidos antiguos miembros de las fuerzas especiales del Ejército.