MOSCÚ, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno ruso ha anunciado el envío al norte de Siria de un batallón de policías militarizados para reforzar la seguridad del contingente desplegado sobre el terreno, si bien Moscú no ha aclarado el número de agentes que forman parte de este nuevo equipo.
El batallón procede de la república de Ingushetia y, según el líder de este territorio, Yunus Bek Yevkurov, tendrá como objetivo proteger al personal de una base aérea y el denominado Centro para la Reconciliación. "En el futuro cercano", Ingushetia también prevé enviar ayuda humanitaria, según la agencia de noticias Sputnik.
Rusia se implicó directamente en la guerra de Siria a finales de septiembre de 2015 y, desde entonces, ha colaborado con el régimen de Bashar al Assad en su lucha contra las fuerzas rebeldes y el terrorismo. Junto a Turquía, impulsó en diciembre un alto el fuego y un nuevo proceso de diálogo.