MOSCÚ 17 Ago. (Reuters/EP) -
La Armada rusa ha empezado este miércoles sus ejercicios navales en el mar Báltico, cerca de Kaliningrado, a pesar de la escalda de tensión entre Moscú y sus vecinos europeos, precisamente, por la presencia militar en el este.
Las maniobras militares incluyen, además de buques de guerra, aviones y helicópteros de combate asociados a la flota rusa en el Báltico, según ha detallado el Ministerio de Defensa en un comunicado.
Kaliningrado es un territorio enclavado entre Polonia y Lituania que Rusia arrebató a Alemania tras la Segunda Guerra Mundial. Su ubicación, rodeado por estados miembro de la OTAN, lo convierten en una zona estratégica para el Kremlin.
Estas prácticas castrenses, aunque programadas, se producen en momentos de máxima tensión entre Moscú y Europa Occidental por las supuestas incursiones ucranianas en la península de Crimea, ocupada por Rusia hace dos años.
Los países bálticos y Polonia temen una invasión rusa como en Crimea, por lo que la OTAN ha accedido a desplegar cuatro batallones multinacionales para enviar "un mensaje muy claro" a Rusia de que "un ataque a un aliado desencadenará una respuesta de toda la Alianza".
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