Moscú ha negado que se trate de mercenarios, tras las críticas contra el Grupo Wagner y Bangui
MADRID, 28 Jun. (EUROPA PRESS) -
Rusia ha rechazado este lunes las acusaciones contra sus instructores militares desplegados en República Centroafricana (RCA) para apoyar la ofensiva del Ejército contra los rebeldes de la Coalición Patriotas por el Cambio (CPC) por presuntos abusos de los Derechos Humanos en el marco de sus operaciones.
"Los instructores militares rusos no pudieron participar ni participaron en asesinatos o pillajes", ha dicho el portavoz de la Presidencia rusa, Dimitri Peskov, quien ha incidido en que es "una mentira más", según ha informado la agencia rusa de noticias Sputnik.
La organización The Sentry y la cadena de televisión estadounidense CNN publicaron el 15 de junio una investigación que implicaba a mercenarios del Grupo Wagner desplegados en RCA de estar detrás de "atrocidades en masa", incluidas torturas y asesinatos, contra civiles en el país africano.
Las autoridades rusas defendieron en abril que los 775 instructores rusos desplegados en RCA no son mercenarios, después de que expertos de Naciones Unidas expresaran su preocupación por el aumento de las contrataciones de mercenarios y fuerzas de seguridad privadas extranjeras por parte del Gobierno del país africano.
La petición para el envío de estos instructores fue formulada en diciembre de 2020 por el presidente de RCA, Faustin-Archange Touadéra, ante la ofensiva lanzada por los grupos rebeldes integrados en la CPC antes de las presidenciales de ese mismo mes, en las que obtuvo un segundo mandato, en medio de denuncias de la oposición por la violencia y las irregularidades.
El país africano se ha visto sumido en una grave crisis a raíz de la eliminación de la candidatura del expresidente Franois Bozizé, quien regresó al país a finales de 2019 para volver a ser candidato a la Presidencia, cargo que abandonó en 2014 ante el levantamiento de los rebeldes de Séléka, predominantemente musulmanes.
MUERTE DE UNA TRABAJADORA DE MSF
Entre los últimos incidentes violentos en el país destaca la muerte el jueves de una trabajadora de Médicos Sin Fronteras (MSF) en un ataque ejecutado por personas no identificadas en los alrededores de la ciudad de Batangafo, según confirmó la organización no gubernamental durante la jornada del sábado.
Así, indicó a través de su cuenta en la red social Twitter que "dos conductores de motocicleta contratados por MSF cayeron en una emboscada tendida por hombres armados cuando trasladaban a pacientes a Batangafo", antes de agregar que "una cuidadora murió por el impacto de las balas".
La ONG manifestó que "otras tres personas resultaron heridas, incluido un conductor de motocicleta contratado por MSF", antes de recalcar que ambos "iban claramente identificados". "Condenamos los continuos incidentes que afectan a la misión médica en RCA e impactan gravemente en el acceso a la sanidad", arguyó, antes de incidir en que es el tercer ataque de este tipo durante el mes de junio.
El ataque fue condenado por la coordinadora humanitaria de Naciones Unidas en RCA, Denise Brown, quien hizo hincapié en que "este ataques es inaceptable, especialmente porque los trabajadores humanitarios responden ante la necesidad de personas en situación de necesidad que fueron atacados en ejercicio de su misión estrictamente humanitaria".
"Los trabajadores humanitarios son neutros y atacarles es más que criminal y golpea a la población. Traslado mis condolencias a la familia de la víctima, a sus seres queridos y muestro toda mi compasión a MSF. Los civiles y el personal humanitario deben ser respetados y protegidos", zanjó Brown a través de un comunicado.
En la actualidad hay cerca de 727.000 personas desplazadas en el país a causa de la violencia, una cifra no alcanzada desde la crisis política de 2014. RCA fue en 2020 el país más peligroso para los trabajadores humanitarios.