MADRID, 2 Ago. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de Rusia han rechazado este martes las acusaciones vertidas por Estados Unidos sobre el supuesto uso de la central nuclear ucraniana de Zaporiyia como una "base militar" y ha subrayado que "las acciones de las Fuerzas Armadas rusas no dañan de ninguna forma la seguridad nuclear en Ucrania".
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, denunció el lunes que las fuerzas rusas "toamron" la central nuclear de Zaporiyia, la más grande de Europa, en el marco de la invasión y agregó que "Rusia está usando ahora la central como base militar para disparar contra ucranianos sabiendo que no pueden y no dispararán de vuelta porque podrían alcanzar por accidente un reactor o un almacén con residuos radiactivos". "Esto lleva la noción de escudo humano a un nivel totalmente diferente y horrible", dijo.
En respuesta, la misión permanente de Rusia ante Naciones Unidas ha apuntado que "rechaza completamente estas acusaciones". "Hemos dicho en repetidas ocasiones que las acciones de nuestras Fuerzas Armadas no dañan de ninguna forma la seguridad nuclear en Ucrania y no interfieren con las operaciones normales en las instalaciones", ha manifestado en un mensaje en su cuenta en Telegram.
Así, ha incidido en que la central "fue tomada bajo protección sólo para evitar el uso de la situación por parte de formaciones nacionalistas ucranianas y mercenarios extranjeros para posiblemente organizar una provocación nuclear con consecuencias impredecibles", al tiempo que ha manifestado que "no hay formaciones militares en la central nuclear de Zaporiyia, a excepción del limitado número de personal militar necesario para garantizar su seguridad".
"Durante los últimos meses, formaciones armadas de Ucrania han cometido varias provocaciones usando drones, incluidos los entregados por estados de la OTAN, con el objetivo de alterar el funcionamiento normal de la central, intimidar al personal, socavar la seguridad y finalmente crear una amenaza de catástrofe nuclear", ha argüido. "Estos pasos están siendo dados por Kiev con el apoyo total de Estados Unidos y otros países occidentales", ha denunciado.
El Ejército ruso tomó a principios de marzo las instalaciones de la central nuclear de Zaporiyia, una de las más grandes de Europa, y que en los primeros compases de la guerra ya fue escenario de intensos enfrenamientos.