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Ataques de Rusia contra la capital de Ucrania, Kiev - @GERASHCHENKO_EN
Ucrania denuncia "crímenes de guerra" y pide más ayuda militar para hacer frente a la ofensiva rusa
MADRID, 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
Rusia ha respondido este lunes a la destrucción del puente de Kerch, que conecta la Rusia continental con la península de Crimea --anexionada en 2014--, con una serie de bombardeos y ataques con proyectiles contra la capital de Ucrania, Kiev, y otras ciudades del país europeo, incidentes que han dejado hasta ahora más de diez muertos y decenas de heridos.
Los ataques llegan horas después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, acusara a los servicios secretos ucranianos del "atentado terrorista" perpetrado el sábado contra el puente, que lo dejó parcialmente inutilizado y que se saldó con al menos tres muertos. "No cabe duda de que es un atentado terrorista que buscaba destruir una infraestructura civil de vital importancia para la Federación Rusa", dijo Putin tras el incidente.
El suceso supuso un grave varapalo para Rusia debido a que es una importante ruta de suministro logístico para las fuerzas rusas en Crimea y en el sur de la Ucrania ocupada por Rusia. Asimismo, fue un duro golpe para la imagen de Putin, que inauguró en 2018 el puente, una de las principales infraestructuras construidas en la península desde su anexión y para Ucrania supone un símbolo de la ocupación.
Apenas unas horas después, varias ciudades ucranianas han sido atacadas con misiles, en el marco de una aparente respuesta rusa a lo sucedido. Moscú había centrado durante los últimos meses sus operaciones en la zona este del país, intentando consolidar territorios de las regiones de Donetsk y Lugansk, así como zonas de Jersón y Zaporiyia que permitieran a Moscú conectar estos territorios con Crimea. De hecho, la semana pasada Putin firmó un decreto anexionando estas zonas, a pesar de que durante las últimas semanas ha sufrido varapalos a nivel militar y ha tenido que retirarse de varias áreas.
El comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Valeri Zaluzhni, ha indicado que "el país terrorista, Rusia, lleva a cabo un ataque masivo con misiles y bombardeos contra Ucrania, usando también drones" y ha detallado que "el agresor ha lanzado 75 proyectiles, 41 de los cuales han sido neutralizados por los sistemas de defensa antiaérea". "Las Fuerzas Armadas hacen todo lo posible para proteger a los ciudadanos. Sin embargo, el ataque del enemigo continúa. Pido a todo el mundo que permanezcan en los refugios", ha señalado Zaluzhni en un mensaje en su cuenta en Telegram.
Una de las ciudades más golpeadas ha sido Kiev, donde han muerto al menos ocho personas y cerca de 25 han resultado heridas, tal y como ha indicado Rostislav Smirnov, asesor del Ministerio del Interior ucraniano. Si bien Kiev ha sido objetivo de varios ataques desde el inicio de la invasión, desatada el 24 de febrero por orden de Putin, los de este lunes son los ataques más graves en los últimos meses y han alcanzado además puntos más céntricos de la capital que en el pasado.
Así, el alcalde de la ciudad, Vitali Klitschko, ha denunciado que "la capital está bajo ataque por parte de los terroristas rusos" y ha añadido que los ataques han alcanzado "infraestructura crítica", mientras que las autoridades han suspendido el servicio de Metro. Tanto Klitschko como el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, han pedido a la población que permanezca en los refugios ante la amenaza de bombardeo.
Zelenski ha denunciado además que Rusia "intenta destruir y eliminar de la faz de la tierra" a los ucranianos. "Totalmente. Destruyeron a nuestro pueblo mientras dormía en Zaporiyia. Mataron a personas cuando iban a sus puestos de trabajo en Dnipro y Kiev", ha manifestad, al tiempo que ha incidido en que "las alarmas antiaéreas no dejan de sonar en toda Ucrania".
ATAQUES CONTRA INFRAESTRUCTURA ENERGÉTICA
A las víctimas en Kiev se suman cuatro muertos en Sloviansk, mientras que también han sido atacadas ciudades como Mikolaiv, Zaporiyia --donde ha muerto una persona--, Dnipro y Jmelnitski. Otra de las ciudades atacadas es Leópolis, donde los bombardeos han causado cortes de los servicios de electricidad y agua caliente.
El presidente del Consejo Local de Leópolis, Andrii Sadovyi, ha resaltado que los ataques han alcanzado "infraestructura crítica" y ha explicado que "debido a la falta de electricidad, las operaciones de las centrales de energía térmica han quedado temporalmente suspendidas". "Los generadores en varias estaciones de bombeo han empezado a restaurar el suministro de agua en la ciudad", ha recalcado.
La situación es similar en Yitomir, donde el jefe de la Administración Militar Regional, Vitali Bunechko, ha confirmado que los ataques han alcanzado "infraestructura energética". "Algunos consumidores reciben servicio de fuentes de respaldo. Continúan los trabajos para eliminar las consecuencias (de los bombardeos)", ha señalado.
Asimismo, el alcalde de Ivano-Frankivsk, Ruslan Martsinkiv, ha indicado que "todo el tráfico" ha sido suspendido en la ciudad y ha reclamado a la población que teletrabaje. "Pido a todas las empresas e instituciones que trabajen 'on line' todo lo posible durante el día", ha manifestado a través de su cuenta en la red social Facebook, según la agencia de noticias Ukrinform.
La región de Járkov ha sido otra de las zonas atacadas y ha sufrido igualmente cortes de electricidad y agua. "El ataque ha alcanzado una instalación de infraestructura energética. En algunas zonas de la ciudad se ha perdido el suministro eléctrico y no hay agua", ha señalado el alcalde de Járkov, Igor Terejov.
Oleg Sinegubov, jefe de la Administración Militar Regional de Járkov, ha reconocido que "la mañana es difícil". "Hacemos frente a terroristas. Decenas de misiles y drones iraníes. Tienen dos objetivos: las instalaciones energéticas del País (...) y la población", ha denunciado, antes de acusar a los rusos de "buscar el pánico y el caos y destruir todo el sistema energético" ucraniano.
CRÍMENES DE GUERRA
En respuesta a los ataques, el ministro de Defensa ucraniano, Oleksiy Reznikov, ha denunciado "crímenes de guerra" por parte de Rusia. "Nuestro enemigo cree que los ataques con misiles son medios efectivos de intimidación. No lo son. Son crímenes de guerra. Civiles mueren y resultan heridos. Ucrania, con el apoyo del mundo civilizado, debe llevar a los terroristas con misiles ante la justicia, y lo haremos", ha dicho.
"Nuestro valor nunca será destruido por los misiles de los terroristas, incluso si golpean el corazón de nuestra capital. No afectarán la determinación de nuestros aliados. Lo único que demuelen de forma irreversible es el futuro de Rusia, un futuro de un Estado terrorista canalla despreciado a nivel global", ha indicado.
Reznikov ha manifestado que "la mejor respuesta al terrorismo ruso con misiles es el suministro de sistemas antiaéreos y contra misiles a Ucrania". "Proteger el cielo sobre Ucrania. Esto protegerá nuestras ciudades y a nuestro pueblo. Esto protegerá el futuro de Europa. El mal debe ser castigado", ha señalado en una serie de mensajes en Twitter.
En esta línea se ha expresado Mijailo Podoliak, uno de los asesores de la Presidencia de Ucrania, que ha recalcado que "los ataques masivos contra ciudades ucranianas es un crimen de guerra a gran escala y en directo". "Sólo hay una respuesta posible: sistemas de defensa antiaérea y contra misiles para Ucrania, expulsión de Rusia de todos los foros internacionales y un tribunal especial, con órdenes de arresto inmediatas contra las autoridades rusas", ha argüido.
Podoliak ha apuntado además que "los ataques deliberados contra el centro de Kiev, Zaporiyia y Dnipro son otra prueba de lo inadecuado del terrorismo del Kremlin". "Rusia no es capaz de combatir en el campo de batalla, pero es capaz de asesinar a civiles. En lugar de hablar necesitamos sistemas de defensa antiaérea, lanzacohetes múltiples y proyectiles de mayor alcance", ha zanjado.