BRUSELAS 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro en funciones de Países Bajos, Mark Rutte, ha expresado este lunes su optimismo sobre ser elegido próximo secretario general de la OTAN, tras reunirse con el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, uno de los dirigente reticentes con su nombramiento.
La cumbre informal convocada para negociar la cúpula de las instituciones comunitarias ha servido para mantener un encuentro con Orbán, uno de los pocos líderes que no han dado su apoyo a Rutte para suceder a Jens Stoltenberg como próximo secretario general de la OTAN.
En este contexto, el mandatario neerlandés ha acordado con Orbán que escribirá una carta en los próximos días para "reflexionar" sobre la reacción social a sus palabras de 2021 cuando dijo que Hungría no tendrá cabida en la Unión Europea si mantenía sin cambios la ley que prohíbe charlas sobre homosexualidad en los colegios, y sobre los desafíos futuros de la alianza atlántica.
Según Rutte, el dirigente magiar no ha reclamado una disculpa explícita sobre sus palabras, que fueron consideradas entonces por Budapest como un "chantaje político", y su carta se limitará a "reflexionar" sobre la polémica que suscitó hace tres años sus declaraciones. Tampoco tiene previsto viajar a Hungría.
"Deben entender que bien son miembros de la UE y por tanto de la comunidad de valores que formamos o bien están fuera", declaró Rutte antes de una cumbre europea dominada por la controvertida ley promovida por el Gobierno de Viktor Orbán.
Rutte concita el apoyo mayoritario de los aliados de la OTAN, incluido Estados Unidos y los principales aliados europeos. De hecho, solo quedan por decantarse Hungría y Eslovaquia, aparte de Rumanía, que presentó el pasado marzo al presidente, Klaus Iohannis, y mantiene su candidatura pese a la falta de apoyos. En todo caso, la OTAN funciona por consenso por lo que todos los socios deberán dar su 'sí' al dirigente neerlandés para suceder a Stoltenberg.
La sucesión copará la cumbre de Washington en julio y la idea de Estados Unidos es usar este foro, en el que los líderes de la OTAN mostrarán unidad en el 75º aniversario de la alianza, para escenificar el cambio de mando en la OTAN.
Stoltenberg dejará el cargo después de diez años al frente de la OTAN en la que ha tenido que afrontar importantes cambios y coordinar la respuesta a la anexión ilegal de Crimea, en 2014, y la invasión rusa a gran escala de Ucrania en 2022.