MADRID, 3 Ago. (EUROPA PRESS) -
El clérigo chií Muqtada al Sadr, que lidera la coalición nacionalista Sayirún, cuyos simpatizantes han ocupado la Cámara baja iraquí, ha hecho un llamamiento este miércoles para disolver el Parlamento y convocar elecciones anticipadas en el país.
"Los viejos rostros no existirán a través de un proceso electoral democrático temprano después de la disolución del Parlamento", ha dicho, agregando que "el pueblo iraquí está cansado de toda la clase dominante", por lo que "los manifestantes deben quedarse y continuar con su plantón hasta que logren sus demandas".
En un discurso pronunciado en la televisión iraquí, ha subrayado que el conflicto "no es entre personas" y se ha referido al incidente de los audios filtrados supuestamente por su máximo rival, el ex primer ministro Nuri al Maliki, asegurando que "algunos" quieren matarle, según ha recogido la agencia de noticias NINA.
Dichos audios, publicados por el periodista Ali Fadel, confirman la antipatía entre ambos y dan cuenta de algunos insultos de Al Maliki contra el clérigo chií, llegando incluso a llamarle "asesino" y "cobarde" durante una reunión.
Asimismo, el clérigo chií Al Sadr ha agregado este miércoles en su discurso que "las demandas maliciosas" obstruyen "la formación de un Gobierno de mayoría", recalcando que no aceptarán ningún derramamiento de sangre", según ha recogido el diario 'Al Iraqiya'.
Con respecto al diálogo, ha dejado claro que "no hay ningún beneficio en el diálogo con ellos". "No cedan a sus rumores de que no quiero diálogo, pero el diálogo con ellos ha sido probado y solo ha traído ruina", ha destacado, agregando que "no busca autoridad", pero pide reformas.
Los simpatizantes de Al Sadr asaltaron el sábado el Parlamento por segunda vez en una semana --después de la invasión del miércoles-- para protestar contra la candidatura del político chií proiraní Mohamed al Sudani como primer ministro.
El Parlamento se encuentra en la Zona Verde, la parte fortificada de Bagdad en la que se encuentran las sedes de las principales instituciones iraquíes y las embajadas extranjeras.
La coalición Sayirún que lidera Al Sadr fue la más votada en las elecciones del pasado mes de octubre. En la misma participan desde nacionalistas iraquíes a comunistas y logró 73 de los 329 escaños en juego. Sin embargo, los diputados de Sayirún se retiraron del Parlamento en junio en protesta por la falta de soluciones a la crisis política.