MADRID 23 Sep. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Líbano, Tammam Salam, ha solicitado este jueves a los países aliados del país que ayuden a poner fin al vacío en la Presidencia, recalcando que la solución "no está sólo en manos de los libaneses".
"Todos los países hermanos y amigos (...) son conscientes de la particularidad de la situación política en mi país y hasta qué punto está influenciada por factores externos, especialmente la gran polarización regional", ha dicho.
Así, Salam ha resaltado durante su discurso ante la Asamblea General de Naciones Unidas que esta crisis "ha llevado a la casi parálisis de la autoridad legislativa, ralentizando el trabajo del Ejecutivo y causando un impacto negativo en la situación económica".
La falta de acuerdo sobre el sucesor de Michel Suleiman --quien abandonó el cargo en mayo de 2014-- ha llevado al país a sufrir el vacío presidencial más largo en su historia, si bien la situación no ha derivado en un conflicto armado, tal y como ocurrió en 1988 y en 2008.
En las dos ocasiones anteriores, las diferencias a la hora de seleccionar al presidente se saldaron con acuerdos regionales, una opción que parece distante en estos momentos debido a la inestabilidad que sufre Oriente Próximo.
Por otra parte, Salam se ha referido a la crisis de refugiados derivada de la guerra en Siria, recalcando que ha supuesto "una carga insoportable que ha superado las capacidades de Líbano".
"Nuestro país acoge, en un área limitada, a un número de desplazados sirios que equivale a un tercio de su población", ha dicho, expresando su desconcento con el nivel de respuesta internacional a la situación.
En este sentido, ha manifestado que "Líbano no puede asimilar a más personas desplazadas", por lo que ha pedido a la ONU que establezca "una visión general para reasentar a los sirios desplazados en Líbano en áreas del interior de Siria".
Un informe realizado por varias agencias de la ONU y publicado el lunes revela que más del 70 por ciento de los refugiados sirios en Líbano viven por debajo del umbral de la pobreza.
El estudio 'Evaluación de la Vulnerabilidad de los Refugiados Sirios', elaborado por el Programa Mundial de Alimentos (PMA), la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF), destaca la precaria situación de los refugiados sirios en el país.
El documento recoge además que la seguridad alimentaria continúa siendo escasa, alertando de que más de un 4,5 por ciento de los niños están por debajo de su peso ideal, situación que afecta en mayor medida a las niñas que a los niños.
Por otra parte, señala que el 54 por ciento de los refugiados necesitan una renovación de las condiciones de su alojamiento para mantener unos estándares mínimos.
COOPERACIÓN EN MATERIA TERRORISTA
Salam se ha referido además a la amenaza terrorista que pende sobre el país, expresando la importancia de una cooperación regional e internacional para hacer frente a la amenaza.
"Consideramos que la tendencia aislacionista de las comunidades, esconderse detrás de muros y la insana promoción de la islamofobia, lucha contra un Islam que está siendo etiquetado de forma engañosa por terroristas para justificar sus crímenes, pero no es una panacea para combatir el terrorismo", ha advertido.
En este sentido, ha argumentado que esos métodos "son más bien una receta para el surgimiento de tendencias violentas, extremistas y racistas que fueron rechazadas por las democracias avanzadas hace mucho tiempo".
"Combatir el terrorismo es un proceso a largo plazo que requiere tremendos esfuerzos a todos los niveles. La condición para eliminar este fenómeno con éxito recae en la erradicación de sus raíces y el factor que lo alimenta, haciendo frente a la injusticia y la pobreza", ha remachado.
CRÍTICAS A ISRAEL
Por último, Salam ha criticado la "continuada ocupación" de los territorios palestinos por parte de Israel, así como el bloqueo impuesto por este país a la Franja de Gaza.
En su discurso, el primer ministro libanés ha reclamado "la aplicación del principio legal de rendición de cuentas en los crímenes de guerra cometidos por Israel para evitar que queden sin castigo".
"Hacemos responsable a Israel del fracaso de todos los intentos para lograr un acuerdo de paz y subrayamos la necesidad de una solución justa, exhaustiva y duradera fundamentada en las resoluciones 242 y 338 del Consejo de Seguridad de la ONU", ha zanjado.