MADRID, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -
El ministro del Interior de Italia, Matteo Salvini, ha acusado este jueves al Gobierno alemán de "chantaje" en las conversaciones para buscar un acuerdo sobre la reubicación de migrantes rescatados en el mar Mediterráneo.
En una entrevista concedida a la cadena de televisión italiana Sky TG24, Salvini ha apuntado a "malas señales" por parte de Belín y ha hecho referencia a la propuesta de Alemania de aceptar a 30 migrantes de un barco de la Guardia Costera si Roma permitía que entrara a puerto un barco de una ONG alemana con 40 migrantes a bordo.
La ONG Sea-Eye, propietaria del 'Alan Kurdi', rescató el miércoles a los migrantes frente a las costas de Libia y en estos momentos se encuentra al sur de la isla de Lampedusa. Salvini ha prohibido la entrada del buque en aguas italianas.
Un portavoz de Sea-Eye ha resaltado que la ONG no va a violar la orden del Gobierno italiano y ha expresado su deseo de que se logre rápidamente una solución, según la agencia alemana de noticias DPA.
El propio Salvini anunció el miércoles un principio de acuerdo con cinco países europeos y la Iglesia italiana para repartir a los más de cien migrantes y refugiados trasladados a puerto por la patrullera 'Gregoretti' de la Guardia Costera.
El Gobierno italiano solo había permitido hasta ahora el desembarco de una mujer embarazada de ocho meses, su marido y sus dos hijos, así como de 16 menores de edad de entre 15 y 17 años.
El líder de la Liga dijo a través de las redes sociales que cinco países europeos --Alemania, Francia, Portugal, Luxemburgo e Irlanda-- y estructuras de la Iglesia Católica italiana se harán cargo de los migrantes. "¡Trabajo hecho! ¡Misión cumplida!", celebró Salvini, señalado de nuevo por un posible delito de secuestro de personas.
"No somos el campo de refugiados de Europa", zanjó Salvini en su mensaje, antes de advertir de que los ciudadanos italianos "que ya tienen sus problemas" no pueden hacerse cargo de las necesidades de estas personas.
El Gobierno italiano ha endurecido las medidas contra las ONG que rescatan a migrantes en el Mediterráneo, a las que ha acusado de favorecer el tráfico de personas. La política de "puertos cerrados" promovida por Salvini se ha traducido en sucesivos bloqueos de embarcaciones, incluso ya en puerto, como en el caso del 'Gregoretti'.
El naufragio de más de un centenar de migrantes y refugiados la semana pasada frente a las costas de Libia puso de manifiesto de nuevo la peligrosidad de una ruta que Salvini aspira a cerrar con una lucha frontal contra las ONG. Según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), casi 700 personas han muerto en el Mediterráneo en lo que va de año, más de 400 de ellas cuando intentaban alcanzar las costas italianas.