ROMA, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
El líder del Movimiento 5 Estrellas (M5S), Luigi di Maio, y el de la Liga, Matteo Salvini, se han reunido este jueves con el fin de pasar página a las desavenencias de las últimas semanas en la coalición de Gobierno en Italia, asegurando que el Ejecutivo sigue adelante y fijando sus prioridades.
El encuentro ha tenido lugar a primera hora de la tarde en la sede del Gobierno, el Palacio Chigi, y se ha prolongado poco menos de una hora. Según la nota conjunta, ha sido "una conversación útil, positiva y cordial" en la que ambos han coincidido en que "el Gobierno debe seguir adelante".
Durante la misma, ambos viceprimeros ministros han repasado las "prioridades" que consideran que debe acometer el Gobierno a corto plazo y "para reavivar un diálogo constructivo con Europa que vuelva a poner en el centro, tras años de gobiernos pasivos, a los italianos".
Salvini y Di Maio se refieren así a la decisión adoptada el miércoles por la Comisión Europea de activar el procedimiento para sancionar a Italia por no haber adoptado medidas suficientes para reducir su deuda pública, que supera el 130% del PIB y seguirá creciendo en los próximos años, en un paso que abre la puerta a una multa equivalente al 0,2% de su PIB, unos 3.500 millones de euros.
Ambos se han mostrado de acuerdo en la necesidad de "rebajar los impuestos", algo "prioritario para relanzar al país". "Hacen falta medidas extraordinarias y ningún aumento de los impuestos para el desarrollo de la economía", han defendido.
En su defensa, han citado un aumento del 8 por ciento en la recaudación por el IRPF y el IVA y la reducción del paro con respecto a 2018 en los cuatro primeros meses de este año "nos dicen que vamos por el buen camino".
Tanto desde la Liga como desde el M5S apuntan a que el cara a cara entre sus líderes ha sido "positivo". Ambos ya habían hablado por teléfono el martes en un intento por enterrar el hacha de guerra y rebajar la tensión que llevó al primer ministro, Giuseppe Conte, a amenazar con su dimisión.
Conte pidió a ambos líderes que abandonen las "polémicas estériles" y se centren en llevar a cabo el contrato de Gobierno que pactaron Liga y M5S tras las elecciones de marzo de 2018. Las diferencias entre los dos partidos se han acrecentado durante la campaña para las elecciones europeas, de las que la Liga salió reforzada como primera fuerza mientras que el M5S se vio relegado a la tercera plaza, por detrás del Partido Democrático, al contrario de lo que ocurrió en las generales.