WASHINGTON 24 Ago. (EUROPA PRESS) -
La ciudad de San Francisco, en California, Estados Unidos, se encuentra en estado de emergencia, por orden del gobernador del estado, Jerry Brown, ante la posibilidad de que el incendio declarado en el parque nacional de Yosemite pueda afectar a sus servicios básicos.
El incendio declarado en el parque nacional sigue sin estar controlado y ya ha quemado más de 126.000 acres (unas 50.000 hectáreas). El jueves, el incendio sólo había afectado a la mitad de dicha superficie.
La zona que se encuentra afectada es una parte remota del parque, según las autoridades, citadas por la cadena CNN, que ha precisado que los visitantes que acuden a la zona pueden divisar el humo desde algunos puntos del parque. Sin embargo, el avance tan rápido de las llamas está afectando a algunas poblaciones.
Alrededor de 4.500 plantas y diversas estructuras que proveen de servicios a San Francisco están en peligro ante la proximidad del fuego, según el Servicio de Bosques y la Oficina de Gestión de Tierras.
Brown ha declarado el estado de emergencia en la ciudad y en todo el condado. "Los Servicios Públicos de San Francisco se han visto obligados a detener el servicio eléctrico", ha indicado el gobernador de California en un comunicado.
Las localidades de Tuolumne y Ponderosa Hill han sido evacuadas para evitar problemas, aunque las autoridades locales no han precisado cuántas personas han tenido que abandonar dichos municipios. Más de 1.800 bomberos trabajan actualmente en la extinción del fuego, ya sea sobre el terreno o mediante aviones.