BOGOTÁ, 19 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha afirmado este domingo que el acuerdo entre el Gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para la búsqueda, ubicación y entrega de personas dadas por desaparecidas durante el conflicto armado, es "otro paso para la paz".
"El acuerdo sobre desaparecidos garantiza a (las) víctimas (el) cumplimiento de derechos a verdad, justicia y reparación", ha dicho el mandatario a través de su cuenta en la red social Twitter, agregando el 'hashtag' #LaHoraDeCreer.
Por su parte, el jefe negociador del Gobierno, Humberto De La Calle, ha detallado que la unidad especial para la búsqueda de desaparecidos tendrá un carácter extrajudicial, según ha informado la emisora colombiana Radio Caracol.
"El carácter extrajudicial es el que permite que se genere el ambiente adecuado para que la información pueda ser plenamente compartida, igualmente es necesario enfatizar que el trabajo que hará la unidad no sustituye ni impide las investigaciones de carácter judicial, tal como quedó establecido en el acuerdo", ha detallado.
Así, ha subrayado que el acuerdo "busca aliviar el inmenso dolor" de los familiares de los desaparecidos, subrayando que se trata de "una muestra más" de que las víctimas son el proceso de paz. "Es la hora de creer en el fin del conflicto", ha remachado.
La fiscalía general de Colombia estima que unas 52.000 personas desaparecieron en el país a consecuencia de la confrontación, aunque algunos organismos de Derechos Humanos manejan cifras diferentes.
Tras largas horas de conversaciones el sábado en La Habana, ambas partes anunciaron en un comunicado conjunto que también han acordado la creación de "una unidad especializada para la búsqueda de personas dadas por desaparecidas" durante el conflicto armado.
Igualmente, el Gobierno colombiano y las FARC se han comprometido a suministrar al Comité Internacional de la Cruz Roja la información de que dispongan "y facilitar la ejecución de planes especiales humanitarios".
TRES AÑOS DE DIÁLOGO
Casi tres años después de que se iniciaran los diálogos de paz, el Gobierno y la guerrilla se han comprometido a firmar, en menos de seis meses, un pacto definitivo para poner fin al conflicto más antiguo de Latinoamérica que ha dejado más de 220.000 muertos y más de un millón de desplazados.
Ambas partes acordaron crear un tribunal especial que impondrá sanciones de entre cinco y ocho años a los miembros de la insurgencia y a militares responsables de delitos de lesa humanidad y crímenes de guerra que confiesen su culpabilidad.
El acuerdo sobre la búsqueda de personas desaparecidas en Colombia se suma a los alcanzados parcialmente en justicia transicional, una reforma para dar acceso a la tierra a los campesinos pobres, lograr la transformación de la guerrilla en partido político, la lucha contra el narcotráfico y el desminado.
Las partes han confirmado que el nuevo ciclo de negociaciones comenzará oficialmente el 27 de octubre.