PARÍS, 1 Dic. (Reuters/EP) -
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha señalado este martes que confía en que las diferencias con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para alcanzar un acuerdo definitivo de paz pueden superarse antes de la fecha límite de marzo, aunque ha reconocido que las conversaciones no son fáciles.
El Gobierno de Santos y las FARC mantienen en Cuba desde hace tres años una negociación para poner fin a un conflicto que ha dejado unos 220.000 muertos y millones de personas desplazadas en el último medio siglo.
Las partes pusieron el 23 de marzo como fecha límite para alcanzar un acuerdo final mientras afinan las negociaciones sobre cinco puntos, que incluyen la participación política de los rebeldes, derechos sobre tierras y tráfico de drogas.
"Nos estamos acercando cada vez más, pero no hay nada garantizado hasta que firmemos", ha declarado Santos a Reuters al margen de las conversaciones climáticas de París. El presidente ha sostenido que las partes deben ponerse de acuerdo en los temas relativos a la Justicia y las víctimas antes de seguir adelante con el desarme, desmovilización y reintegración.
"Será difícil, pero creo que podemos alcanzar un acuerdo y espero que podamos firmarlo en los próximos meses", ha asegurado hablando un fluido inglés.
PLEBISCITO
Santos respalda un proyecto de ley que está en debate en el Congreso colombiano para llevar adelante un plebiscito para dar a los colombianos la última palabra sobre el acuerdo de paz. Las FARC rechazaron la medida el 9 de noviembre, antes de que el Congreso insistiera en que las partes deben determinar en la mesa de negociación las reglas de la votación.
"El plebiscito es la única forma de cumplir con la promesa que le hice a los colombianos de que tendrán la última palabra", ha aseverado el mandatario.
En la cumbre del clima, Santos ha lanzado un fondo de 600 millones de dólares como parte de un plan de 1.900 millones de dólares para desarrollar áreas ricas en biodiversidad y recursos que fueron especialmente afectadas por años de conflicto.
"Muchos procesos de paz fracasan porque no se hacen planes para después del fin del conflicto, por lo que nosotros queremos implementar eso lo antes posible", ha destacado.
Casi el 60 por ciento de la deforestación en Colombia se produjo en zonas con los mayores índices de violencia por el conflicto, y casi el 90 por ciento se dio en zonas rurales, de acuerdo a cifras oficiales.
Santos ha resaltado que la deforestación es consecuencia del tráfico de drogas, la minería ilegal y la sustitución de cosechas ilegales por otras legales. "Esto se enfocará en territorios en los que hemos tenido conflictos. Como consecuencia de eso, la inequidad está concentrada y es donde tenemos nuestros mayores problemas ambientales", ha explicado.