MADRID, 30 Ene. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross, ha aseverado este jueves que la rápida expansión del coronavirus chino, cuyo brote se originó en Wuhan y se ha saldado por el momento con 170 muertos, podría tener un impacto positivo sobre la tasa de empleo en Norteamérica.
Tal y como ha señalado durante una entrevista con la cadena de televisión Fox News, el virus hace que las empresas tengan "otra cuestión que considerar" a la hora de revisar su cadena de suministro, lo que podría fomentar que algunas industrias vuelvan a estar en manos principalmente mexicanas o estadounidenses.
Ross, que ha trasladado sus condolencias a las víctimas del virus y sus familias, ha aseverado que "se trata de otro factor de riesgo a tener en cuenta, por lo que esto podría ayudar a acelerar el regreso de muchos empleos a Norteamérica, muchos de ellos a Estados Unidos".
Varias empresas estadounidenses que operan en China, entre ellas Google y Starbucks, han comenzado a cerrar algunos de sus centros de trabajo en el gigante asiático debido al brote. Aerolíneas como British Airways y American Airlines han cancelado los vuelos entre Los Ángeles y ciudades como Pekín y Shanghái.
La expansión de la epidemia provocada por el brote de coronavirus originado en la ciudad china de Wuhan, que ha causado más de 130 víctimas mortales y miles de infectados en China, ha llevado a numerosas empresas, incluyendo multinacionales como Starbucks, Ikea o McDonald's, a cerrar temporalmente varios de sus centros de trabajo en China, coincidiendo con las celebraciones del Año Nuevo Lunar en el país.
Como consecuencia del agravamiento de la crisis, las autoridades chinas decretaron una prórroga de tres días de las vacaciones que están disfrutando millones de trabajadores en el país con motivo del Año Nuevo Lunar, por lo que no regresarán a sus puestos hasta el 3 de febrero.
Pekín anunció también que otras instituciones, incluyendo guarderías, escuelas de primaria y secundaria, retrasarán también su apertura.
Asimismo, coincidiendo con el parón vacacional, algunas de las principales empresas chinas decidieron cerrar sus oficinas y recomendaron a sus empleados que trabajen desde casa como medida de prevención, mientras que las autoridades chinas han impuesto restricciones a los viajes y al transporte en decenas de ciudades.
Aunque China es el epicentro del brote y el país más afectado, el coronavirus se ha extendido ya a otros países del sureste asiático y también se han detectado casos en Europa y América.
Los signos comunes de infección incluyen síntomas respiratorios, fiebre, tos, y dificultades para respirar. En casos más graves, la infección puede causar neumonía, síndrome respiratorio agudo severo, insuficiencia renal e, incluso, la muerte.
En 2003, más de 600 personas murieron en todo el mundo (349 en China) a causa del SARS o síndrome respiratorio agudo, que dejó 5.327 afectados en nueve meses.