BRASILIA, 25 Nov. (Reuters/EP) -
El Senado brasileño ha aprobado el martes un decreto presidencial que ayuda a los productores hidroeléctricos afectados por una sequía histórica, en una medida que podría aumentar el apetito de los inversores por las plantas de energía que serán subastadas el miércoles.
La aprobación del decreto es crucial para otorgar garantías judiciales a los posibles interesados en una subasta en la que el Gobierno espera recaudar 17.000 millones de reales (4.600 millones de dólares), según los analistas.
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, depende de ese dinero para mejorar las finanzas públicas, gravemente comprometidas después de años de grandes gastos y exenciones fiscales considerables a las empresas locales.
El decreto autoriza a los propietarios de las plantas hidroeléctricas a elevar los gastos de la electricidad a los clientes si su producción cae debido a las sequías.
A las centrales eléctricas se les permitió aumentar las tarifas este año después de que acumularon fuertes deudas en el 2013 y el 2014, cuando el Gobierno ordenó rebajar los cobros para controlar artificialmente la inflación.
Brasil ha registrado tres años consecutivos de sequía sin precedentes en el sur densamente poblado. Alrededor de dos tercios de la red eléctrica de Brasil dependen de la energía hidroeléctrica.