LA HABANA/WASHINGTON, 26 May. (Reuters/EP) -
Un grupo bipartidista de senadores de Estados Unidos ha vuelto a presentar este jueves un proyecto de ley que busca acabar con todas las restricciones para los viajes a Cuba, pero esta vez con un mayor número de promotores, en una señal del creciente apoyo a la distensión entre Estados Unidos pese a lo incierto de su futuro.
La Ley de Libertad para Viajar a Cuba había sido presentada en 2015 por ocho legisladores republicanos y demócratas, pero nunca llegó a votarse en la sala. El más reciente intento cuenta con 55 promotores. Aunque esta cifra supone una mayoría en el Senado, que cuenta con 100 escaños, no lleva a los 60 necesarios para hacer avanzar la ley.
El presidente republicano, Donald Trump, amenazó durante su campaña electoral del año pasado con revertir la normalización de las relaciones con la isla caribeña que inició en 2014 el entonces mandatario, el demócrata Barack Obama. El Gobierno de Trump está revisando la política estadounidense hacia el antiguo enemigo de la Guerra Fría.
Obama alivió las restricciones comerciales y de viaje, propiciando un auge del turismo estadounidense a Cuba, aunque éste no esté oficialmente permitido.
Más de 40 compañías y organizaciones de viajes de Estados Unidos instaron el miércoles a Trump a no revertir la ampliación de los permisos para ir del país a Cuba.
"Los estadounidenses son castigados por nuestra prohibición de viajar, no el Gobierno cubano", ha defendido el senador republicano Jeff Flake, quien con el demócrata Patrick Leahy encabeza el grupo que patrocina el proyecto de ley.
Según Flake, levantar la prohibición daría a los estadounidenses más libertad pero también beneficiaría a los cubanos. "Esto seguro que tendrá beneficios positivos para el floreciente sector privado y empresarial de la isla", ha defendido.
El número de visitantes estadounidenses a Cuba aumentó en un 74 por ciento en 2016, impulsando el negocio de los hoteles, restaurantes y taxis de la isla pero también de las operadoras de cruceros estadounidenses y las aerolíneas, que han entrado en el mercado en el último año.
"Aplaudimos a los senadores Flake y Leahy por su liderazgo al apoyar a estadounidenses y cubanos eliminando la política arcaica y desfasada", ha declarado el presidente del grupo Engage Cuba, James Williams.
Sin embargo, en el Congreso sigue habiendo una fuerte oposición a que se ponga fin al aislamiento de Cuba, liderado por algunos cubano-americanos como el senador republicano Marco Rubio y el demócrata Robert Menendez, que sostienen que Washington no debería facilitar los viajes a Cuba hasta que el Gobierno cubano no avance hacia la democracia.