MADRID, 20 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los separatistas tuareg han criticado este miércoles el despliegue de 'cascos azules' por parte de la Misión Multidimensional Integrada de Estabilización de Naciones Unidas en Malí (MINUSMA) en la región de Kidal y han pedido su retirada.
La misión de paz ha creado una zona de seguridad en un radio de 20 kilómetros en torno a Kidal para impedir nuevos incidentes violentos y proteger a los civiles. "En caso de violación, la MINUSMA reaccionará conforme a su mandato", ha advertido.
En respuesta, la Coordinación de Movimientos del Azawad (CMA) ha reclamado en un comunicado a la MINUSMA "que ponga fin a la zona de seguridad lo antes posible (...) y que deje a las partes arreglar sus diferencias".
Tanto la CMA como las milicias de Plataforma, un bloque aliado de Bamako, se han responsabilizado mutuamente de los enfrentamientos, concentrados principalmente en un eje de carreteras del área septentrional.
El lunes, miembros de la Plataforma se hicieron con el control de la localidad de Anefis, lo que presagiaría un avance hacia la ciudad de Kidal --el principal bastión de los rebeldes tuaregs--.
Por su parte, el Ejecutivo ha pedido tanto a la Unión Africana como a la ONU que investigue las violaciones del alto el fuego cometidas en los últimos días. La MINUSMA ha amenazado con aplicar sanciones contra los responsables.