El primer ministro de Kosovo apunta a un acto "terrorista" de Belgrado mientras la UE condena el "despreciable sabotaje" y pide una investigación
MADRID, 30 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, así como la cúpula de su gobierno, han desmentido categóricamente este sábado toda relación con un ataque a un canal estratégico de suministro de agua en Kosovo, y han descrito lo ocurrido como una operación de "falsa bandera" de las autoridades kosovares para "redoblar su presión" sobre la población de mayoría serbia en el norte de la autoproclamada república.
"Las acusaciones infundadas contra Serbia, hechas apresuradamente y sin ninguna evidencia, son profundamente irresponsables y preocupantes. Tales afirmaciones infundadas tienen como objetivo dañar la reputación de Serbia, así como socavar los esfuerzos para promover la paz y la estabilidad en la región", ha denunciado este sábado Vucic en un comunicado en su cuenta de Instagram.
El mandatario se refirió en estos términos a la explosión que reventó este pasado viernes uno de los muros del canal de Ibar-Lepenac, cerca de la ciudad de Zubin Potok, que suministra agua potable a cientos de miles de residentes del norte de Kosovo y parte de la capital kosovar, Pristina, así como a dos centrales térmicas. El Gobierno kosovar ha efectuado varias detenciones y anunciado el comienzo de una investigación al respecto.
"Estos actos", señaló esta pasada noche el primer ministro kosovar, Albin Kurti, "son obra de organizaciones terroristas, con una alta probabilidad de que cuenten con el apoyo de Belgrado, en un intento infructuoso de socavar una democracia que es fuerte y resistente".
Esta declaración ha provocado una furibunda respuesta este sábado por parte de Vucic, quien ha apuntado a las autoridades kosovares por diseminar mentiras sobre lo ocurrido. "Quienes señalan apresuradamente y sin pruebas intentan desviar la atención de su propio conocimiento o de su posible implicación en el incidente", ha señalado.
El primer ministro serbio, Milos Vucevic, se ha expresado en términos todavía más contundentes a expresar el "temor de que las instituciones de Kosovo aprovechen los acontecimientos (...) para ejercer más presión y atacar a la comunidad serbia", tras denunciar "incursiones" de la Policía de Kosovo en varias poblaciones de mayoría serbia en torno a Zubin Potok.
La fuerza de paz de la OTAN en Kosovo, la KFOR, ha condenado el ataque y comenzado a brindar "apoyo de seguridad" después del incidente: "Es importante esclarecer los hechos relacionados con ese ataque, así como llevar a los responsables ante la justicia", ha señalado en un comunicado.
OCHO DETENIDOS
El ministro del Interior de Kosovo, Xhelal Sveçla, ha confirmado poco después que ocho personas han sido detenidas tras una serie de operaciones policiales en diez localidades del norte de la autoproclamada república.
Los ocho detenidos son sospechosos de estar implicados en la explosión, así como en los recientes ataques con granadas de mano a una comisaría de policía y a una instalación municipal en la ciudad de Zvecan, según ha hecho saber el ministro, quien ha descrito el ataque contra el canal como "el atentado terrorista más grave" desde el final de la guerra de Kosovo en 1999.
El director de la Policía de Kosovo, Gazmend Hoxha, ha añadido en rueda de prensa, recogida por el portal de noticias kosovar Koha, que las fuerzas de seguridad se han incautado además de tres granadas de mano, dos fusiles AK47, un revólver, munición de varios calibres, detonadores para activar artefactos explosivos, 200 uniformes militares, cascos militares, máscaras, cuchillos y dinero.
LA UE CONDENA EL ATAQUE Y LLAMA A UNA INVESTIGACIÓN INMEDIATA
La Unión Europea ha trasladado también este sábado su condena en del "ataque terrorista" contra el canal en lo que describe como "un acto despreciable de sabotaje contra la infraestructura civil crítica de Kosovo, que proporciona agua potable a una parte considerable de la población kosovar y es un componente vital de su sistema energético".
La UE ha ofrecido apoyo a las autoridades de Kosovo y sigue coordinando los próximos pasos con los socios pertinentes, incluso a nivel local con la KFOR y la misión civil de la UE para el Estado de derecho, EULEX, está prestando asistencia a las autoridades de Kosovo de conformidad con su mandato.
"Nos solidarizamos con todas las personas de Kosovo que se han visto afectadas por el ataque", ha hecho saber el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, quien ha transmitido esta tarde a Kurdi "mensajes de apoyo y solidaridad"
"El acto criminal cometido en Zubin Potok debe investigarse y sus autores deben ser llevados ante la justicia. A este respecto, la UE hace un llamamiento a todas las partes interesadas para que cooperen plenamente con las autoridades de Kosovo y seguirá de cerca los acontecimientos", concluye el comunicado.