BELGRADO, 16 Sep. (Reuters/EP) -
El ministro del Interior de Serbia, Nebojsa Stefanovic, ha anunciado el envío de más policías a la frontera con Hungría para "evitar más ataques de la Policía húngara", poco después de que refugiados y fuerzas de seguridad de enfrentaran.
Las autoridades serbias han condenado este miércoles el uso de un cañón de agua y gases lacrimógenos por parte de Hungría contra los inmigrantes y refugiados agolpados en su frontera, argumentando que Budapest no tiene "derecho" a hacerlo.
Las ONG han confirmado varios heridos en el lado serbio de la frontera, mientras que Hungría ha denunciado que una veintena de sus agentes han sufrido daños. Las autoridades húngaras también han informado de que dos niños "fueron lanzados por encima de la valla de seguridad" que separa ambos países.
Stefanovic ha anunciado un refuerzo policial en la frontera. "El objetivo es evitar más ataques de la Policía húngara en nuestro territorio", ha explicado el ministro, en un comunicado en el que también ha apuntado que intentarán alejar a los inmigrantes de la valla de una forma "humana" y "respetuosa".
Por su parte, Hungría ha reforzado la presencia de fuerzas de seguridad con tres vehículos militares armados, según un reportero de Reuters. Los vehículos se han salido de la carretera para situarse en campos adyacentes, a varios cientos de metro de la frontera.