MOGADISCIO/NAIROBI, 18 Ene. (Thomson Reuters Foundation/EP) -
El grupo terrorista somalí Al Shabaab, afín a Al Qaeda, ha desmentido que esté amenazando y secuestrando a civiles para forzar el reclutamiento de niños soldado, a pesar de los testimonios recabados en un reciente informe de Human Rights Watch (HRW).
Según esta ONG, los terroristas ordenaron a mediados de 2017 a autoridades y profesores de las zonas rurales de la región de Bay, en el sur del país, que les facilitasen niños --algunos incluso de ocho años-- si no querían sufrir las represalias de la milicia.
Un portavoz de Al Shabaab ha rebatido estas acusaciones en declaraciones a Thomson Reuters Foundation y ha asegurado que el grupo no recluta a personas menores de 15 años y que ninguno de los alistamientos es forzoso. En este sentido, ha asegurado que se limitan a enviar a los niños a escuelas islámicas.
"Hay una orden de Al Shabaab en las áreas bajo nuestro control para que los niños aprendan y les facilitamos profesores en los internados islámicos donde estudian. Hemos hablado con los líderes de los clanes sobre la educación de sus hijos", ha explicado.
En este sentido, ha alegado que, una vez que los estudiantes "completan la educación", vuelven con sus padres. "Nadie está obligado a unirse a nuestras fuerzas. No queremos que los niños de zonas remotas sean tan ignorantes como los animales", ha añadido este portavoz.
HRW ha calculado que miles de menores han sido sometidos a este adoctrinamiento y se han convertido en milicianos en las últimas décadas y ha advertido de que las escuelas religiosas que Al Shabaab instauró en 2015 solo sirven para contribuir a implantar una estricta visión de la 'sharia'.
El ministro de Planificación y Desarrollo Económico de Somalia, Gamal Hassan, ha admitido en rueda de prensa que no le sorprenden este tipo de acusaciones, en la medida en que "Al Shabaab sigue realizando actividades que son ilegales, inmorales y contrarias al Derecho Humanitario". No obstante, no ha aclarado las medidas que podría adoptar el Gobierno para garantizar la protección de la infancia.
Los milicianos de Al Shabaab fueron expulsados de Mogadiscio en 2011 y han perdido casi todo el territorio que llegaron a controlar en su momento más álgido. Sin embargo, la organización sigue representando una de las principales amenazas para el país africano y lanza frecuentes atentados en la capital y contra objetivos tanto militares como civiles.