MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de Siria han denunciado este martes la muerte de doce civiles, entre ellos niños, en varios bombardeos supuestamente llevados a cabo en los alrededores de Raqqa por la coalición internacional que encabeza Estados Unidos.
Según las informaciones recogidas por la agencia estatal siria de noticias, SANA, los ataques alcanzaron una zona en la que había varias embarcaciones en las que un grupo de civiles intentaban escapar de la ciudad, controlada por el grupo yihadista Estado Islámico.
El Observatorio Sirio por los Derechos Humanos, con sede en Londres e informantes en el país árabe, ha elevado a 21 los muertos, confirmando que el ataque aéreo fue llevado a cabo contra una zona de la ciudad en la que los civiles se habían reunido para escapar en embarcaciones.
Horas antes, el portavoz de la 'Operación Resolución Inherente', Ryan Dillon, aseguró que la coalición había bombardeado a yihadistas que intentaban cruzar el Éufrates para reforzar las posiciones en Raqqa.
Así, detalló que los ataques aéreos han destruido 19 embarcaciones, doce posiciones de combate, ocho vehículos y un arsenal, así como unidades tácticas de los yihadistas, tal y como ha recogido la agencia británica de noticias Reuters.
Por el momento no está claro si los bombardeos denunciados por Siria y el Observatorio Sirio por los Derechos Humanos son los mismos a los que ha hecho referencia Dillon.
La coalición internacional ha sido acusada en las últimas semanas de la muerte de decenas de personas en bombardeos en Raqqa y sus alrededores.
Las operaciones aéreas de la coalición tienen lugar en respaldo a las operaciones de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), que este mismo martes han logrado entrar en un barrio del este de Raqqa, 'capital' de Estado Islámico en el país.
Las FDS, que están integradas por unidades de combatientes árabes y kurdos, anunciaron el 6 de noviembre el comienzo de las operaciones para la reconquista de Raqqa, en el marco de la ofensiva 'Éufrates Enfurecido'.
La coalición liderada por Estados Unidos estima que hay entre 3.000 y 4.000 milicianos de Estado Islámico atrincherados en Raqqa, donde han erigido defensas contra el anticipado asalto. Estados Unidos ha confirmado este martes que ha comenzado a distribuir armas a las YPG para ayudarlas a tomar Raqqa.
Naciones Unidas ha expresado este mismo martes su preocupación por la seguridad de los cerca de 400.000 civiles que "continúan expuestos a los combates y los bombardeos" en la provincia de Raqqa.
"La situación humanitaria en la provincia de Raqqa sigue siendo pésima, con la mayoría de la población haciendo frente a problemas graves a la hora de cubrir sus necesidades inmediatas", ha dicho Alessandra Vellucci, portavoz de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) en Ginebra.