MADRID, 9 May. (EUROPA PRESS) -
El Partido Nacionalista Escocés de Nicola Sturgeon ha celebrado este sábado su cuarta victoria tras alcanzar 64 escaños, uno menos que la mayoría, una vez completado el recuento de las elecciones legislativas de Escocia celebradas el pasado jueves.
EL SNP ha conseguido un escaño más que en las elecciones de 2016 y le han seguido los conservadores con 31, que mantienen sus resultados, los laboristas con 22, que pierden dos escaños, Los Verdes escoceses ocho, que suman dos, y los liberales demócratas cuatro, que pierden uno, según ha recogido la BBC.
Tras conocerse los resultados, Sturgeon ha tildado la victoria del SNP como "histórica y extraordinaria" y ha mencionado que su prioridad será "seguir con el trabajo" de la gestión de la pandemia.
Asimismo, ha incidido en que la mayoría independentista del SNP y Los Verdes significa que no hay una "justificación democrática" para que Boris Johnson bloqueara un referéndum contra la "voluntad" del pueblo escocés y es que este resultado abre la puerta a la posibilidad de un nuevo referéndum de independencia por las discrepancias abiertas con Londres sobre la salida de Reino Unido de la Unión Europea.
Por su parte, el primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, ha invitado este sábado a los recientes ganadores de las elecciones de Escocia y Gales y a los líderes de Irlanda del Norte a una reunión para abordar la crisis del coronavirus.
Tras la victoria del Partido Laborista galés que mantienen a Mark Drakeford en el poder, Johnson ha expresado a este en una carta que ambos comparten "la creencia en el enorme potencial de nuestro Reino Unido, tanto para ser una fuerza para el bien en el mundo como para ser un motor de seguridad y prosperidad para sus ciudadanos aquí en casa".
En otra carta, Johnson ha expresado su intención a Sturgeon de "invitarla a unirse a mí, a mis colegas del Gobierno del Reino Unido y a otros en una reunión cumbre para discutir nuestros desafíos compartidos y cómo podemos trabajar juntos en los próximos meses y años para superarlos", según recoge 'The Guardian'.
Sturgeon, que este viernes descartaba la mayoría directa, ha prometido volver a poner sobre la mesa la cuestión de la independencia de Escocia a pesar de que el primer ministro británico, Boris Johnson, reiteraba ese mismo día que el tema estaba fuera de toda discusión. "Irresponsable y temerario", aseguró Johnson al 'Daily Telegraph'.
Desde el Gobierno británico se tiene además la postura legal de que debe ser Londres quien apruebe un referéndum en Escocia sobre la secesión de Reino Unido. El plebiscito previo, celebrado en 2014, arrojó una victoria de los partidarios de la permanencia, 55 a 45 por ciento.
La participación en estas elecciones escocesas ha sido la más alta desde que se estableció el Parlamento en 1999, con un 66 por ciento.