Los socialistas españoles rechazaron la enmienda porque "no coincide en su literalidad" con la línea del Gobierno

Actualizado: jueves, 11 marzo 2010 14:38

ESTRASBURGO (FRANCIA), 11 (EUROPA PRESS)

La delegación de socialistas españoles en el Parlamento Europeo votó en contra de una enmienda que apoya los "esfuerzos" de la presidencia española por "normalizar" las relaciones con La Habana y llama a la "retirada absoluta" de la posición común. El texto no coincide en su "literalidad" con el objetivo del Gobierno español, que quiere "abrir una reflexión" sobre la revisión de las relaciones y "no imponer nada", matizó la eurodiputada socialista María Muñíz.

El pleno del Parlamento Europeo adoptó este jueves una resolución de dura condena por la muerte "cruel y evitable" del disidente cubano Orlando Zapata y que exige al régimen castrista avances en materia de Derechos Humanos y democracia. El texto fue negociado y cerrado por todos los grupos políticos en la cámara, a excepción de la Izquierda Unitaria.

La enmienda que fue rechazada por 452 votos en contra y 67 a favor fue presentada por el español Willy Meyer (IU) y otros seis eurodiputados en nombre del grupo de Izquierda Unitaria.

En concreto, apoyaba "los esfuerzos de la presidencia española por normalizar las relaciones UE-Cuba, proceso que debería culminar con la retirada absoluta de la Posición Común". También pedía a la UE emprender "un diálogo político amplio con el Gobierno cubano, aplicando los mismos criterios que a todos los países con los que mantiene relaciones".

Los socialistas españoles votaron en contra del texto por el "compromiso político" alcanzado con las otras fuerzas para no presentar enmiendas a la resolución y, además, consideran que el grupo de Izquierda Unitaria no tenía "legitimidad" para presentar enmiendas a un texto "que no quiso negociar", explicó María Muñiz a la prensa en Estrasburgo.

Para el también socialista Luis Yáñez, el texto que sí salió adelante es un resultado "brillante" que ofrece una "sólida unidad" de la Eurocámara respecto a la situación en Cuba que "nunca" se había logrado hasta ahora. Las distintas fuerzas decidieron "no hablar (en la resolución) de lo que divide" para evitar "contaminar" el mensaje de apoyo a los presos políticos y disidentes en Cuba, explicó.

Muñiz subrayó que la resolución es el fruto de un consenso que no se centra en términos políticos ni prejuzga el futuro de posibles negociaciones, sino que "denuncia la situación inhumana" que se vive en la isla.

Asimismo, reiteró que los socialistas están "a favor de modificar la posición común si hay consenso" en el Consejo de la UE y apoyan al Gobierno español en los intentos para buscar un marco "más eficaz" en las relaciones con La Habana. Pero "no se puede exigir", dijo en referencia a la enmienda rechazada.

La posición común es una postura "obsoleta" que ha probado su "ineficacia" y que fue aprobada cuando la Unión Europea estaba formada sólo por 15 miembros, por lo que sería necesaria su "revisión", añadió Yáñez.

La delegación socialista española también se abstuvo en la votación de un párrafo de la resolución que insta a la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, a establecer contactos con la sociedad civil. María Muñiz explicó a los medios la abstención no tanto por "por lo que dice, como por lo que no dice", ya que consideran que debe existir un diálogo "también" con las autoridades.

Con respecto a las intenciones del Partido Popular de registrar una proposición no de ley en el Congreso para condenar la muerte de Zapata a través de un texto similar al de la Eurocámara, Muñiz y Yáñez coincidieron en que a Cámara española "ya" adoptó una declaración de este tipo al poco de fallecer el disidente.

Muñiz añadió que son "foros" distintos con "dinámicas diferentes" y que "no se puede trasladar en los mismos términos" una resolución desde el Parlamento Europeo.