MADRID, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
Solo 51 países tienen educación presencial a tiempo completo debido a la pandemia de coronavirus, mientras que en más de 90 los estudiantes reciben formación a través de múltiples modalidades, con algunas escuelas abiertas, otras cerradas y muchas ofreciendo opciones híbridas, según el rastreador de la recuperación de la Educación Global COVID-19.
Esta herramienta, lanzada en colaboración por la Universidad Johns Hopkins, el Banco Mundial y UNICEF, busca ayudar a los países en su toma de decisiones, mediante el seguimiento de los trabajos de planificación de reapertura y recuperación en más de 200 países y territorios, después de que la pandemia interrumpiese la educación de 1.600 millones de niños en todo el mundo el año pasado
La iniciativa recoge y muestra información sobre cuatro áreas clave: estatus de la educación, modalidades de aprendizaje (remoto, presencial o híbrido), disponibilidad de apoyo para la recuperación escolar y estatus de la disponibilidad de vacunas para profesorado, según un comunicado de sus impulsores.
Así, pretende aprovechar el trabajo de la Universidad Johns Hopkins en la recopilación de datos de calidad sobre casos de la COVID-19, pruebas y vacunas, junto con los papeles estratégicos que juegan el Banco Mundial y UNICEF en el apoyo operativo y de políticas a los países durante la pandemia.
La herramienta indica que a nivel regional, está empezando a haber indicios de cambios en las modalidades de aprendizaje.
En concreto, la educación en remoto sigue siendo la dominante en Oriente Próximo y África del Norte, donde en las últimas semanas las escuelas seguían cerradas en su mayoría; y, sin embargo, en África Subsahariana la mayoría de estudiantes están yendo físicamente a la escuela.
Por otro lado, en la región de Asia Oriental y el Pacífico se ha reanudado en su mayoría la educación presencial, con estrictas medidas de distanciamiento social. Las regiones de Asia Meridional, Asia Central y Europa se apoyan sobre todo en una educación híbrida allí donde las infraestructuras lo permiten.
En América Latina, los países están utilizando enfoques mixtos que incluyen educación a distancia, híbrida y presencial. Sin embargo, la mayoría de escuelas permanecen parcial o completamente cerradas, y la educación en remoto es la modalidad más extendida, según la herramienta.
"El mundo ya se enfrentaba a una crisis educativa antes de la COVID-19", ha señalado en este aspecto el director de Educación del Banco Mundial, Jaime Saavedra, quien ha precisado que "la tasa de pobreza educativa -proporción de niños de 10 años incapaces de leer un texto corto apropiado para su edad era del 53 por ciento en los países de ingresos medios y bajos antes de la COVID-19, en comparación con la de los países de ingresos altos, que se situaba en el 9 por ciento".
"Tras un año de pandemia, las interrupciones continuadas de la educación, los cambios en las modalidades de aprendizaje y la preocupación por el bienestar de los estudiantes son todavía mayores, y esta crisis de aprendizaje está empeorando. Es probable que los cierres de escuelas derivados de la COVID-19 aumenten la tasa de pobreza educativa hasta alcanzar el 63 por ciento", ha añadido.
De este modo, Saavedra ha hecho hincapié en la importancia de este rastreador. "Recopilar y dar seguimiento a estos datos acerca de qué están haciendo los países es muy importante para ayudarnos a comprender la magnitud de qué apoyo se necesita a medida que avanzamos, ya que aprenderemos de las principales tendencias observadas en los países", ha subrayado.
Además de trazar el estado operativo de las escuelas, esta herramienta también dará seguimiento al apoyo que están recibiendo los estudiantes, con la inclusión de cambios en el calendario escolar, tutorías y recuperaciones, especialmente en los grados de educación primaria.
Estas intervenciones serán "clave" en el proceso de recuperación educativa tras un año que ha afectado al aprendizaje y bienestar del 95 por ciento de escolares de todo el mundo.
Igualmente, en países donde la vacuna de la COVID-19 ya está disponible, la herramienta está midiendo si los profesores han sido identificados como grupo prioritario. A principios de marzo, la mayoría de profesores no estaban siendo vacunados como grupo prioritario en los países de ingresos bajos y medio bajos, según el rastreador, que señala que de los 130 países donde la información sobre la vacuna estaba disponible, más de dos tercios no están actualmente vacunando a profesores como grupo prioritario.
"Incluso a medida que las vacunas están empezando a ponerse a nivel mundial, para millones de escolares de todo el mundo las consecuencias de esta pandemia están lejos de acabarse", ha explicado el jefe de Educación de UNICEF, Robert Jenkins.
De esta manera, ha abogado por "priorizar la reapertura de escuelas, así como la vacunación de los profesores una vez que el personal sanitario de primera línea y las poblaciones de alto riesgo estén inmunizados".