MADRID, 2 Oct. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Somalia, Omar Abdirashid Ali Sharmarke, ha propuesto este jueves durante su discurso ante la Asamblea General de Naciones Unidas un 'Plan Marshall' somalí para ayudar a reconstruir el país y generar oportunidades de inversión y desarrollo.
"Estoy aquí hoy (por el jueves) para proponer un 'Gran Plan de Desarrollo'. Este nuevo plan se dentrará en reconstruir la infraestructura social y física: carreteras, escuelas, hospitales, centros comunitarios, puertos, aeropuertos y mercados, que son esenciales para revivir al Estado y su economía", ha dicho.
"Miles de millones de dólares en impuestos han sido inyectados en Somalia, y hemos logrado algunos éxitos, pero no los suficientes. Necesitamos ahora un acercamiento diferente: no queremos caridad, queremos inversiones directas", ha recalcado.
En este sentido, ha destacado que este nuevo plan "garantizará transparencia y rendición de cuentas para cada inversión". "Cada país miembro de la ONU tendrá la oportunidad de convertir a Somalia en una potencia económica y un futuro socio comercial", ha agregado.
Así, Sharmarke ha destacado que su Gobierno "tiene una visión, reconstruir las instituciones estatales", destacando que hasta la fecha se han formado tres estados regionales interinos, al tiempo que se avanza para celebrar "unas elecciones libres y democráticas".
"Debemos dar prioridad además a nuestras fuerzas de seguridad. Sigue existiendo una insurgencia activa, y arriesgamos nuestras vidas para desmantelarla", ha resaltado, destacando los avances logrados el año pasado por el Ejército y las tropas de la Unión Africana en su lucha contra Al Shabaab.
Sin embargo, ha lamentado que los soldados somalíes "están mal pagados, mal alimentados y mal equipados", abogando por "invertir para profesionalizar las fuerzas de seguridad de Somalia".
"Otro asunto de gran importancia es el de los refugiados somalíes y migrantes indocumentados que viven en campamentos temporales, algunos desde hace más de dos décadas y media", ha concedido.
"Agradecemos a los países de la región que ayuden y acojan a nuestra gente, pero reconocemos que muchos continúan viviendo en una crisis perpetua, sin esperanza alguna de volver o conseguir residencia o ciudadanía, lo que es inaceptable", ha dicho.
Por último, Sharmarke ha manifestado que "la mayoría de la población somalí tiene menos de 30 años", subrayando que "son el futuro de la nación, y hay que encontrarles hueco en el liderazgo del país, creando trabajos y oportunidades para ellos".
"Es para ellos para los que estamos gastando los recursos de hoy, y es para ellos para los que pagaremos este último dividendo. Necesitan los tipos de desafíos y oportunidades que mueven a todos los jóvenes del mundo", ha remachado.