MADRID, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -
El exboxeador y 'streamer' Andrew Tate ha asegurado este miércoles que no existen pruebas en su contra a medida que es investigado en Rumanía por presunta organización delictiva y trata de personas y ha defendido que "no existe la justicia" en el país poco antes de ser interrogado por una unidad de la Policía especializada en crimen organizado.
Tate, sin embargo, ha insistido en que su caso está "vacío" a pesar de que sigue bajo custodia junto a su hermano Tristan, que ha sido acusado también de violación y ha insistido por su parte en que tampoco hay pruebas en su contra.
La Policía no ha presentado por el momento cargos contra ninguno de los dos hermanos, que llevan detenidos desde el pasado 29 de diciembre. No obstante, la semana pasada un juez decidió extender hasta el 27 de febrero el periodo de detención mientras avanzan las pesquisas.
La Fiscalía los acusa de reclutar víctimas que eran trasladadas a varias propiedades a las afueras de la capital rumana, Bucarest, donde eran explotadas sexualmente y obligadas a crear contenido pornográfico. Ambos han negado dichas acusaciones.
También ha sido prorrogada la detención de dos sospechosos, una antigua policía y la novia de Andrew Tate, según ha recogido la agencia rumana de noticias Agerpres. Todos ellos son sospechosos de formar un grupo criminal organizado para explotar sexualmente a mujeres.
La detención de Tate tuvo lugar después de que este publicara un vídeo en redes sociales en el que respondía a una burla de la joven activista medioambiental Greta Thunberg, mientras comía pizza de una popular marca rumana.
La aparición de esta caja de pizza en el vídeo dejaba claro su paradero, lo que permitió a las autoridades del país europeo acelerar el caso e irrumpir finalmente en el lugar en el que se alojaba.