MADRID 25 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Sudán del Sur ha anunciado este lunes que retirará su apoyo a los grupos armados sudaneses a finales de noviembre, reclamando a los mismos que abandonen su territorio antes de dicha fecha.
El ministro de Defensa de Sudán del Sur, Kuol Manyang Juuk, ha detallado que la decisión es parte de un acuerdo entre ambos países sobre seguridad fronteriza, según ha informado la emisora local Eye Radio.
"Nos hemos dado de plazo hasta finales de noviembre. Estamos ya en el proceso, y hemos dicho a la cúpula del SPLM/SPLA-N que no queremos que estén en Sudán del Sur", ha manifestado.
Asimismo, ha reclamado al Gobierno de Sudán que haga lo mismo, recordando que el líder rebelde y exvicepresidente, Riek Machar, llamó nuevamente en agosto a tomar las armas desde la capital sudanesa, Jartum.
Las palabras de Manyang Juuk han llegado apenas unos días después de que el Gobierno de Estados Unidos reclamara a Sudán del Sur que "deje de acoger o dar apoyo" a los grupos armados opositores de Sudán, recordando la resolución 2046 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas en este sentido.
"Pese a sus obligaciones bajo el Derecho Internacional y los reiterados acuerdos entre Sudán y Sudán del Sur, sigue habiendo informes creíbles que apuntan a que Sudán del Sur acoge y da ayuda a grupos armados opositores sudaneses", dijo el viceportavoz del Departamento de Estado, Mark Toner.
Por ello, pidió a los líderes sursudaneses que "redoblen sus esfuerzos para cumplir con sus compromisos con Sudán, según los cuales ambas partes acordaron poner fin a su apoyo a los grupos armados opositores en ambos lados (de la frontera)".
En este sentido, Toner argumentó que "la presencia de fuerzas opositoras armadas sudanesas en Sudán del Sur, y su participación en los conflictos internos en el país, desestabiliza tanto a Sudán como a Sudán del Sur".
"De hecho, supone además una violación de los términos del Acuerdo para la Resolución del Conflicto en Sudán del Sur", afirmó, reclamando que "el Gobierno de Sudán del Sur garantice que estos grupos no pueden llevar a cabo operaciones armadas en el país ni a través de la frontera".
Las autoridades de Jartum y Yuba se han acusado frecuentemente de respaldar a los grupos armados que operan en ambos países desde la independencia de Sudán del Sur en 2011.