ESTOCOLMO 22 Oct. (Reuters/EP) -
La Agencia de Migración de Suecia espera la llegada de 190.000 refugiados huidos del conflicto en sus respectivos países, principalmente Siria e Irak, lo que añade más presión al país nórdico en un momento en el que busca dar refugio a miles de refugiados de cara a la llegada del invierno.
La Agencia de Migración, que se ha visto obligada a incrementar en varias ocasiones sus estimaciones de llegada de refugiados, cree que el número de solicitantes de asilo será de entre 140.000 y 190.000 personas, de las cuales 33.000 serían menores no acompañados.
"Hemos visto fotografías de gente que, literalmente, camina desde Grecia a través de los Balcanes hasta Alemania y Suecia", ha dicho a los periodistas el director de la Agencia de Migración, Anders Danielsson. "La crisis actual de los refugiados no tiene precedentes, ni desde la perspectiva europea ni desde la sueca", ha añadido.
La Agencia asegura que necesitarían 70.000 millones de coronas suecas extra (alrededor de 7.400 millones de euros) durante los dos próximos años para poder hacer frente a la crisis, basándose en el escenario en el que 160.000 refugiados solicitasen asilo en Suecia durante este año y 135.000 lo hiciesen para el próximo.
Añaden que el flujo de refugiados podría ser menor el año que viene, pero que, aun así, la cifra podría alcanzar los 170.000.
Más de 100.000 solicitantes de asilo han llegado a Suecia en lo que va de año, sobrepasando el récord previo de la guerra de los Balcanes en la década de los 90 y superando las previsiones de 74.000 personas que había hecho la institución en julio.
Cerca de 10.000 refugiados llegaron la semana pasada, llevando al límite la capacidad del país para habilitar refugios para los recién llegados. "La pasada noche estaba todo lleno", ha asegurado Danielsson.
La Agencia estima que podrían no tener espacio para acomodar a una cifra de entre 25.000 y 45.000 refugiados hasta finales del año. Decenas de miles de personas podrían pasar el frío invierno sueco en tiendas con calefacción.
Las encuestan muestran que la mayoría de los suecos acepta la llegada de refugiados, pero su influjo ya ha causado tensiones. La semana pasada hubo varios ataques a centros de refugiados y el partido anti inmigración, Demócratas Suecos, ha iniciado una campaña en los medios para desalentar a los refugiados de llegar al país nórdico.
Los sondeos dan al partido un 20 por ciento de los votos, por encima del 13 por ciento que consiguieron en las elecciones de otoño de 2014.
El Gobierno y los principales partidos de centro derecha continúan sin llegar a un acuerdo en sus negociaciones sobre como lidiar con el número de refugiados esperado para este año. Los Demócratas Suecos no son parte de las negociaciones.